Tras entrevistar a sobrevivientes de situaciones traumáticas, descubrí que no siempre puedo deshacerme de los recuerdos de esas conversaciones. Me he sentido torturada, a veces durante semanas, por las insoportables injusticias que mis entrevistados relataron durante el diálogo. Y me resulta difícil hablar de estos sentimientos con mis colegas.
Al mismo tiempo, me ha preocupado que mi comportamiento como periodista no haya sido el apropiado o que mis preguntas fuesen insensibles. Incluso me he preguntado por qué o para qué he hecho esas coberturas.
Un día encontré una respuesta clara a esta última pregunta: todas esas personas, a menudo mujeres, habían hecho un trabajo colosal. Pidieron la ayuda de especialistas, buscaron terapia, encontraron el coraje de denunciar su caso a la policía. Sus historias de fuerza y valor deben contarse; pueden servir de ejemplo a otros y ayudar a romper el círculo vicioso de la violencia.
Los periodistas no deben escapar de esos temas. En cambio, deben esforzarse por cubrirlos bien y prepararse lo suficiente para hacerlo.
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Hablé con la psicóloga, activista y fundadora del Centro Women’s Perspectives Martha Chumalo, para que me diera consejos acerca de cómo los periodistas pueden cuidar de sí mismos mientras cubren temas difíciles. Chumalo ha trabajado con mujeres sobrevivientes de violencia y abuso durante más de 20 años. En diciembre de 2020, recibió el Premio Tulip de derechos humanos de los Países Bajos.
Puedes ver la primera parte de nuestra conversación aquí, donde Chumalo explora las mejores prácticas para hablar con personas que sobrevivieron a la violencia sexual. En este segundo artículo, encontrarás consejos sobre cómo evitar el agotamiento emocional y profesional cuando cubres temas angustiantes o difíciles.
Conserva tu salud mental
Chumalo recomienda una combinación de enfoques a corto y a largo plazo para ayudar a mantener tu salud mental.
En el corto plazo, los eventos externos tienen un mayor impacto cuando ya estamos debilitados por algo más, sea una enfermedad, falta de sueño, sobrecarga de trabajo u otro factor estresante. En estos casos, tenemos dificultades para gestionar experiencias potencialmente traumáticas. “Si te sientes psicológicamente agotado, deja la conversación difícil para más tarde. Descansa un poco", recomendó. "Es mejor planificar ese trabajo para el comienzo de la semana, después del fin de semana, cuando hayas tenido la oportunidad de recuperarte".
Justo antes de la entrevista, tómate el tiempo necesario para adoptar la mentalidad adecuada, planificar y pensar en todo. Si eres nuevo en el periodismo, no trabajes con historias tan difíciles de inmediato, aconsejó.
A largo plazo, una serie de prácticas de higiene psicológica como la meditación, la resistencia al estrés o cursos de atención plena para periodistas pueden ayudar a mejorar tu tolerancia al estrés. “Si tu trabajo va acompañado de estrés regular, es bueno tener un terapeuta o un grupo de intervisión”, dijo Chumalo.
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Sé consciente de tu bienestar durante la entrevista
El trabajo de los periodistas puede requerir un contacto estrecho con el sufrimiento humano. Para evitar que esta realidad te abrume, debes desarrollar rutinas que te ayuden a conectarte.
Por ejemplo, si estás haciendo una entrevista y notas que estás respirando con el pecho, lo que aumenta el estrés, o cuando sientes que estás a punto de llorar en respuesta a la historia que estás escuchando, Chumalo recomienda adoptar el la práctica de los "Cinco Puntos".
“Durante nuestras sesiones de formación para los periodistas que trabajan con temas de violencia, les hablo de la práctica de los 'Cinco Puntos'. Te sientas en una silla y sientes cómo tus dos pies, tus nalgas y tu espalda están plantados en el suelo y en la silla”, explicó Chumalo. “Trata de concentrarte en las sensaciones que sientes en cada uno de esos puntos. El cuerpo debe tener el máximo apoyo para no desperdiciar recursos adicionales. Después de eso, inhala y exhala con tu abdomen, y lleva tu atención de la conversación a tu respiración. Es poco probable que la persona con la que estás hablando se dé cuenta de esto, pero tu resistencia al estrés mejorará".
Recupérate después de la entrevista
Después de una entrevista difícil, los periodistas deberían darse la oportunidad de recuperarse. Esto puede significar pasar un tiempo a solas en la naturaleza u ocuparte de necesidades como dormir y comer bien, beber mucha agua y sentirte seguro: “Una ducha o un jacuzzi pueden ayudar mucho. Cuantos más sentidos estén comprometidos, mejor".
Si la historia te traumatizó, habla con un profesional. “Si sientes que estás volviendo constantemente a esa conversación, habla con un terapeuta”, aconsejó Chumalo. “Por lo menos, es bueno tener una persona con la que puedas compartir los problemas y preocupaciones con los que estés lidiando. No es necesario que escuches ningún consejo de ellos. Lo que es importante es simplemente ser escuchado".
Si has encontrado este contenido angustiante o difícil de encarar, no estás solo. Hay recursos disponibles para ayudarte. Empieza explorando los recursos del Centro Dart de Periodismo y Trauma, y busca apoyo psicológico si es necesario.
Mariana Verbovska es un periodista que vive y trabaja en Lviv, Ucrania. Fue becaria visitante Milena Jesenská en el Instituto de Ciencias Humanas de Viena, Austria, donde investigó cómo los medios cubren el cambio climático. El año pasado, Verbovska fue Periodista del Mes de IJNet.
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