Tras una década de guerra, la prensa yemení está en peligro de extinción

Sep 3, 2024 en Libertad de prensa
Yemen

La guerra civil de Yemen, que dura ya casi una década, ha supuesto graves riesgos para los periodistas.

Desde su estallido en 2015, los grupos enfrentados los houthis en el norte, y el gobierno yemení reconocido por la ONU y el separatista Consejo de Transición del Sur en el sur han acusado a periodistas independientes de promover la desinformación y dedicarse al espionaje, amenazándolos, secuestrándolos y denetiéndolos arbitrariamente.

El Sindicato de Periodistas Yemeníes (YJS) ha documentado el asesinato de 45 periodistas desde que comenzó el conflicto. En la actualidad hay seis periodistas detenidos por distintos grupos armados.  

A medida que la guerra se prolonga, el futuro del periodismo independiente en Yemen se vuelve cada vez más incierto.

Autoridades hostiles

A pesar de las treguas, los periodistas yemeníes siguen corriendo peligro. El informe semestral 2024 del YJS documentó 41 agresiones contra periodistas y medios de comunicación en el primer semestre de 2024, incluidas amenazas, incitaciones a la violencia y secuestros.

A principios de mayo, un hombre armado atacó al secretario general del YJS, Mohammed Shubaita, en la capital, Saná, matando a su primo e hiriendo a Shubaita.

El YJS responsabilizó del ataque a las autoridades de facto houthis de Saná, que luego declararon que el incidente se había producido como consecuencia de los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y hombres armados, y que Shubaita había quedado atrapado en el fuego cruzado.

Autocensura

Antes de la guerra, los periodistas yemeníes podían moverse libremente por el país sin temor a ser detenidos, secuestrados, agredidos o asesinados. Informar sobre el terreno hoy es un desafío mucho mayor como consecuencia de la fragmentación del país en múltiples autoridades y grupos militantes.

Para cuidarse, los periodistas de Yemen suelen recurrir a la autocensura. Al cubrir cuestiones humanitarias, por ejemplo, pueden utilizar un lenguaje más suave al mencionar a los bandos enfrentados, y se abstienen de abordar coberturas más delicadas en favor de temas como los deportes o el medio ambiente.

Mohammed Al-Samaei, periodista de la provincia suroccidental de Taiz, cuenta que si bien los periodistas eligen a menudo no cubrir temas políticos y militares que puedan atraer la atención hostil de las facciones enfrentadas, ello no garantiza su seguridad.

"La cobertura sobre el terreno es peligrosa, tanto si el periodista cuenta una historia de guerra como de entretenimiento. Las partes en conflicto dudan de las intenciones de los periodistas, y algunos los consideran espías", afirma Al-Samaei. "Por eso, la productividad de los trabajadores de los medios disminuye, y la calidad del periodismo se resiente".

Falta de trabajo

Con el cierre de numerosos medios de comunicación independientes en Yemen debido a la guerra, ha crecido el número de publicaciones vinculadas a los bandos en conflicto

Aproximadamente 119 revistas y periódicos han dejado de circular desde septiembre de 2014, cuando los houthis tomaron el control de Saná, de acuerdo con datos del YJS. En la actualidad, solo 13 periódicos independientes o afiliados al gobierno siguen funcionando en el país.

Como consecuencia, son muchos los periodistas que han abandonado el oficio para trabajar en otros campos. Incluso cuando tienen empleo en prensa, cobran poco y trabajan sin contrato: entre US$150 y US$200 al mes.

"Muchos periodistas trabajan sin contrato por poco dinero, y muchos medios tanto locales como extranjeros se niegan a firmar contratos con los trabajadores de prensa en Yemen", señala el YJS en su informe.

Falta de entrenamiento en seguridad

Los periodistas que informan sobre la guerra civil en Yemen deben recibir formación en seguridad, pero los cursos escasean.

"Saber cómo contar una historia y responder al quién, qué, cuándo, dónde y por qué no protege a los periodistas durante la cobertura sobre el terreno", señala Al-Samaei. "La formación en seguridad sí puede. Pero los medios yemeníes no dan prioridad a esos programas".

Las pocas organizaciones que ofrecen formación en seguridad para periodistas son el YJS, el Studies and Economic Media Center y el South 24 Center for News and Studies.

Recomendaciones

Dado el entorno hostil para la prensa en Yemen, los periodistas deben extremar los cuidados antes de embarcarse en una cobertura sobre el terreno. En la medida de lo posible, deben obtener los permisos necesarios de las autoridades del lugar en el que van a informar antes de salir al campo. Sin credenciales, se los puede considerar enemigos o espías.

Los periodistas en Yemen deben mantenerse alejados de las líneas del frente, las plataformas de lanzamiento de misiles y los vehículos militares. Durante los enfrentamientos, los combatientes recurren a bombardeos que pueden herir o matar a periodistas, incluso si no son el objetivo directo.

Los periodistas también deben tener cuidado con lo que publican en redes sociales, evitando el lenguaje incendiario sobre un determinado grupo o publicaciones que apoyen a un determinado bando del conflicto.

Mientras permanezca la inestabilidad política y se prolonguen las hostilidades, persistirán los riesgos para la prensa yemení. En esta desafortunada realidad, los enemigos de los periodistas superan en número a sus amigos.


Foto de Lara Jameson vía Pexels.