Para Chani Guyot, el periodismo tiene que ver con el propósito y el impacto. Cuando detectó un patrón de evasión de las noticias en Argentina, supo que los periodistas tenían que involucrar mejor a sus audiencias.
Guyot trabajó durante más de dos décadas en el diario argentino La Nación, donde fue el primer director de innovación de la empresa, al frente de los equipos encargados de modernizar el periódico, antes de convertirse en redactor jefe. Se marchó para desarrollar un nuevo proyecto y, en abril de 2018, fundó RED/ACCIÓN, una plataforma digital con un enfoque basado en soluciones que busca fomentar un impacto positivo en la sociedad.
Becario Knight del Centro Internacional para Periodistas (ICFJ), Guyot está trabajando para crear una nueva red de colaboración bajo RED/ACCIÓN llamada Red de Periodismo Humano, que retratará cómo personas, comunidades y organizaciones enfrentan y resuelven los problemas más urgentes de la actualidad. La iniciativa promoverá el intercambio de contenidos entre sus 20 miembros, tanto en español como en inglés.
¿Cómo comenzó tu carrera periodística?
Empecé colaborando en el diario de nuestro colegio. Escribía, y también editaba y diseñaba. Fue como un amor a primera vista.
Después de colaborar en algunas revistas y trabajar como freelance, en 1996 empecé en La Nación, un periódico importante aquí en Buenos Aires, donde aprendí todo sobre el oficio.
Nunca se me pasó por la cabeza dedicarme a otra cosa que no fuera el periodismo, especialmente como redactor. Me considero un generalista, no un especialista. Esa es la línea que siempre he intentado seguir.
¿Qué te llevó a fundar RED/ACCIÓN y definir su enfoque?
Creamos RED/ACCIÓN con un equipo chico con la visión de un periodismo que se preocupa por su impacto y por cómo afecta a su audiencia y al mundo. Me encanta el concepto de periodismo de soluciones, pero cuando empezamos a desarrollar la publicación, pensamos que no se podía construir un medio de comunicación completamente en torno a ese tipo de periodismo.
Nos replanteamos nuestro trabajo como lo que llamamos "periodismo humano", en el que añadimos a algunos conceptos periodísticos otros enfoques que probablemente no estén alineados con la postura de las grandes cadenas, pero creemos que forman parte del oficio. Nos encantan las historias de personas y prestamos mucha atención a cómo interactuamos con nuestra audiencia. Y tenemos esta idea filosófica en el sentido de que, cuando publicamos algo, nos preguntamos cuál es el impacto de lo que publicamos en nuestra gente, en el público y también en las personas retratadas.
¿Cómo contribuyó tu participación en el programa Velocidad del ICFJ a los objetivos de RED/ACCION?
Cuando empezamos, sabíamos que la evasión de las noticias era un problema real. Y en cierto modo fundamos RED/ACCIÓN para afrontar ese problema y ver qué podíamos hacer.
Pero, por supuesto, también estamos trabajando por la sostenibilidad. Uno de los muchos cambios que se están produciendo en nuestra industria tiene que ver también con los modelos de negocio y la sostenibilidad. Velocidad nos dio un fuerte impulso que nos llevó a lanzar nuestra agencia de contenidos, que en el último año ha sido muy importante como fuente de ingresos para nuestro modelo.
Dicho esto, aunque hayamos ganado muchos premios, tengamos una gran audiencia y estemos haciendo algo significativo y relevante, seguimos buscando un modelo de negocio sólido. Eso sigue siendo parte del viaje y de lo que intentamos conseguir. Con Velocidad hemos dado un gran paso adelante en la forma de gestionar una nueva empresa de medios. Además, tengo que decir que en Argentina el contexto empresarial está muy distorsionado; tenemos una tasa de inflación del 100%. Eso es un reto para cualquier empresa.
¿De qué modo ha contribuido IJNet a tu profesión?
Creo que hoy la industria del conocimiento no está en los libros. Hoy, el conocimiento de la industria está en publicaciones como IJNet. Cada vez que encuentras un caso o profundizas en un aspecto concreto de nuestra industria, pues ahí es donde aprendes. Por supuesto, aprendes de tu experiencia y de tus éxitos y fracasos, pero también de los demás.
Forma parte de mi rutina leer publicaciones como IJNet, que informan sobre lo que está pasando en nuestra industria y lo que medios específicos han conseguido en sus propios mercados. Creo que el aprendizaje entre socios es esencial; estoy convencido de que formar parte de alianzas, asociaciones y aprender entre iguales es fundamental en este momento del periodismo y los medios.
¿Cuál es tu proyecto favorito de RED/ACCIÓN y por qué?
Creemos, y así lo entendemos, que RED/ACCIÓN es también una plataforma de experimentación. Y probablemente una de las historias más lindas que hemos producido, por la forma en que la escribimos, fue un video en colaboración con una organización de la sociedad civil aquí en Argentina. Se llama Techo y se dedica a construir refugios y casas para personas que viven en la calle o que tienen problemas de salud. Quisimos relatar en primera persona lo que experimentan estas personas cuando llueve y tienen miedo de que el agua entre en sus casas.
Nuestro equipo se reunió con estas familias, les contamos el proyecto y se lanzaron. Creamos un grupo de WhatsApp y luego tuvimos que esperar a que llegara una tormenta. En tiempo real, nos lo cuentan y experimentamos cómo viven ese momento; un momento concreto. El vídeo crea empatía con el problema. Además, nos muestra que hay mucho espacio para la experimentación.
Creo que, como industria, tenemos la responsabilidad de seguir experimentando con nuestros formatos narrativos y de seguir afrontando nuestro desafío más importante: mantener informada a la gente de una manera relevante e interesante para ayudar a nuestro público a ser mejores ciudadanos y mejores vecinos.
¿En qué proyectos trabajas en este momento?
En la Red de Periodismo Humano, que acabamos de lanzar con el apoyo del ICFJ. Es el núcleo de mi beca: queremos reunir a 20 medios de comunicación —en español e inglés— con una idea muy simple: cada socio aporta dos historias originales, informadas, de lo que hemos llamado periodismo humano. Luego nos encargamos de las traducciones y las réplicas.
Creemos que, de media, podemos multiplicar por 18 el alcance de una historia, con lo que llegará a nuevas audiencias, pero también conseguiremos que se publiquen otras 38 historias para servir a su público. Por sencillo que parezca, también es complicado porque exige una colaboración extrema: todo el mundo tiene que hacer su propio trabajo y asegurarse de que las historias están bien contadas, tengan las fuentes adecuadas, están bien escritas, etc. Tenemos mucha confianza, sentido del humor, y esperanza en este tipo de proyecto que, en cierto sentido, intenta ampliar la práctica y el alcance de las historias humanas de todo el mundo.
Imagen cortesía de Chani Guyot.