Cómo los medios turcos cubren a los refugiados sirios

Oct 14, 2022 en Cobertura de crisis
Niños en un campo de refugiados, Grecia

Turquía se ha convertido en el hogar de una afluencia sin precedentes de refugiados sirios desde el comienzo de la guerra civil en Siria hace una década. Mientras periodistas locales y extranjeros intentan llenar lagunas en la cobertura del tema en Turquía, las comunidades desplazadas padecen un ciclo de noticias nacionales que, en el mejor de los casos, es condescendiente y, en el peor, abiertamente racista hacia los refugiados.

Cobertura de los refugiados

El intento de golpe de Estado del 15 de julio contra el gobierno turco, que se produjo un año después del punto máximo de la crisis de los refugiados sirios en 2015, provocó una purga en los medios abiertamente críticos con el gobierno del presidente Erdogan. Desde entonces, las principales publicaciones gubernamentales han adoptado una postura editorial que se hace eco de las políticas y la retórica del partido gobernante, el AKP.

En 2019, los periodistas de investigación Funda Cantek y Cavidan Soykan examinaron la bienvenida inicial de los medios progubernamentales a los refugiados sirios en contraste con los ataques populistas de la oposición, a menudo en la forma de desinformación que demoniza a los sirios. Hasta el acuerdo entre la UE y Turquía, que buscó frenar el ingreso de refugiados hacia Europa —y que, sin embargo, no ha conseguido evitar que miles de personas queden atrapadas en campos superpoblados en Grecia—, la política de Turquía ofrecía asilo a las víctimas de la guerra y del desplazamiento en Siria.

Al mismo tiempo, los críticos del gobierno de Erdogan profundizaron su descontento hacia los refugiados, y sus voces no hicieron más que aumentar. Los medios progubernamentales también acusaron a los refugiados sirios de estar jugando con el sistema. "Asimismo, los medios presentan a los niños refugiados como mendigos, vagabundos involucrados en delitos y vendedores de pañuelos de papel", escribieron Cantek y Soykan.

"La gran polarización no solo es una amenaza para la libertad de los medios, sino también a la hora de cubrir todos los problemas sociales en el contexto actual", dijo el periodista Erol Onderoglu, quien fue encarcelado en 2016 por apoyar al periódico kurdo prohibido Ozgur Gundem

Por ejemplo, en un estudio para el Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad de Ankara en el que se encuestó a periódicos turcos que representaban distintos puntos de vista políticos, como Hurriyet, Sabah, Cumhuriyet y Yenicag, los investigadores Tugba Asrak Hasdemir y Selcuk Cetin concluyeron que los actuales medios convencionales de Turquía no ofrecen una suficiente comprensión pública ni reconocimiento formal de los derechos de los refugiados sirios.  

Informar sobre las amenazas a los refugiados

Los refugiados sirios están en la primera línea de enfrentamientos socioeconómicos sangrientos y politizados, de acuerdo con Muhammed Siddik Yasar, ciudadano kurdo de Turquía que ha creado un grupo de derechos de los refugiados llamado Solidaridad Tarlabasi.

"Dado que el tema de los refugiados sirios es una importante fuente de ingresos para los medios de comunicación y la noticia más buscada, existe un gran interés en el tema y hay estructuras mediáticas que lo tratan tanto positiva como negativamente", dijo Yasar. "El periodismo sobre los sirios es uno de los contextos más abusivos en este campo, porque estas situaciones no están bajo el control de los refugiados".

Algunos tipos de coberturas pueden incluso poner a los refugiados en peligro, especialmente en torno a temas de gran carga política como las elecciones. "Los refugiados corren peligro antes de las elecciones como resultado de programas políticos fallidos, en los que los sirios y otros refugiados son un blanco fácil, lo que resulta en asesinatos, ignorancia y odio", dijo Yasar.

Sin embargo, el periodismo aún puede tener efectos positivos en los refugiados. Cuando 35 personas se quedaron atrapadas recientemente en la frontera turco-griega —donde murió trágicamente una niña de cinco años—, informar sobre la situación ayudó a poner a los refugiados a salvo, explicó Gozde Cagri Ozkose, editor de contenidos en inglés en Agencia Mezopotamya.

"Turquía los empujaba de vuelta a Grecia, mientras que Grecia no permitía que los trabajadores humanitarios llegaran a ellos", contó. "Solo gracias a que los periodistas cubrieron su situación, los refugiados fueron llevados a un campamento en Grecia".

Sultan al-Kanj, periodista sirio de habla árabe, subrayó las dificultades a las que se enfrentan los periodistas cuando cubren a los refugiados en el país. "En Turquía no es posible que los periodistas se acerquen a los refugiados detenidos. En todos los lugares de detención antes de la deportación, las autoridades turcas impiden a la prensa hablar con los deportados o fotografiarlos", declaró al-Kanj. "Se pueden hacer coberturas equilibradas incluyendo a los abogados sirios que siguen asuntos de los refugiados, y a través de algunos periodistas turcos cercanos al gobierno".

El rol de los medios independientes

Mientras los medios de comunicación turcos se encuentran atrapados entre plataformas pro y antigubernamentales, con los refugiados sirios en el medio, las organizaciones más pequeñas del país intentan construir un mejor periodismo que cubra éticamente el tema.

La respuesta global de think tanks y ONG, como la organización sin ánimo de lucro HasNa, con sede en Washington D.C., ha analizado el panorama mediático internacional y cada acto de politización populista que explota y denigra a los refugiados sirios en Turquía. En 2020, HasNa puso en marcha la Iniciativa de Respuesta a los Refugiados de Turquía y puso en marcha dos proyectos, uno llamado Media in Tandem, que ayuda a abordar la desinformación que rodea a los refugiados y a crear una formación de periodismo para la paz en las comunidades turcas y sirias, explicó la presidenta de HasNa Rukmini Banerjee.

"Uno de los resultados esperados de Media in Tandem es animar a los jóvenes periodistas sirios y turcos a trabajar juntos para comprender plenamente los puntos de vista de cada uno y contar la historia de cada uno desde un lugar de empatía y autenticidad, sin una agenda", explicó Banerjee. 

Sin embargo, a medida que se acercan las elecciones generales turcas de 2023, hay un estado de creciente animosidad hacia los refugiados sirios en Turquía. A pesar del trabajo de los periodistas que intentan trabajar mejor, entre el entorno de los principales medios de comunicación de Turquía, los prejuicios populares hacia la población árabe y una cultura gubernamental que teme a la transparencia y redirige la culpa de sus políticas, hay pocos indicios de que la cobertura vaya a mejorar.


Imagen de Julie Ricard en Unsplash.