Crisis económicas, convulsiones políticas, violencia étnica y corrupción son solo algunos de los problemas que enfrentan los países africanos. Si bien los principales medios de comunicación del continente informan regularmente sobre estos temas, hay una sorprendente falta de redacciones locales enfocadas exclusivamente en ellos. Esto ha dado lugar a lagunas de conocimiento, que a su vez afectan a las políticas y al desarrollo de la región.
Se trata de un vacío que Sahelien.com está dispuesto a llenar. Con sede en Malí y con el orgullo de ser "el principal sitio de noticias del Sahel", Sahelien produce coberturas y análisis en profundidad de los problemas y desarrollos de la zona.
"Nacimos hace ocho años y hemos aprendido mucho a partir nuestro trabajo", dice Joe Penney, quien fundó el sitio en 2014. "Tenemos un equipo en Bamako que hace un trabajo realmente ejemplar en condiciones que suelen ser difíciles. Nos hemos ganado la reputación de ser una fuente de noticias confiable".
Además, el Sahelien ha creado nuevas vías para que los periodistas freelance en particular informen para el medio.
El poder a los freelancers
El Sahelien se apoya principalmente en freelancers para ampliar su alcance y los temas que cubre. "Hemos ampliado nuestra cobertura en toda África Occidental centrándonos en Nigeria durante un periodo de seis meses, y durante ese tiempo trabajamos principalmente con freelancers. Una parte de nuestro staff está Bamako cubriendo el Sahel, y tenemos previsto cubrir regularmente Nigeria y otros países de África Occidental. Cuando eso ocurra, contrataremos más personal a tiempo completo", explica Penney.
Para el periodista Ahmad Adedimeji Amobi, quien escribió un reportaje sobre los jóvenes licenciados que luchan contra el desempleo, el papel que desempeñan los freelancers para garantizar que el Sahelien informe sobre temas clave es fundamental. "Los periodistas freelance producimos historias importantes a las que las redacciones no pueden acceder", dice. "Sahelien ha hecho mucho por amplificar los esfuerzos de estos periodistas, y ha conseguido que historias poco difundidas se escuchen y estén disponibles para la conciencia del mundo".
Una cobertura de impacto
El Sahelien publica en francés e inglés para salvar las diferencias informativas entre las comunidades francófonas y anglófonas del Sahel. El sitio produce videos, documentales y boletines en ambos idiomas para llegar a su público. "El hecho de estar situado en el Sahel lo hace único al ofrecer coberturas bilingües. Además, para garantizar la amplitud de su alcance, se invita a estos periodistas a desglosar su proceso de trabajo y la historia en sí en las redes sociales", explica Amobi.
Hasta la fecha, el Sahelien ha sacado a la luz leyes controvertidas, conflictos en curso y más. Y lo que es más importante, el medio ha logrado notables impactos.
"Nuestra reciente cobertura de las sanciones de la CEDEAO y la respuesta maliense ha sido muy intensa", dice. "Pelumi Salako escribió, en mi opinión, el mejor reportaje sobre el conflicto entre agricultores y pastores en Igangan; hemos publicado excelentes trabajos de Ope Adetayo sobre salud mental; de Shade Mary-Ann Olaoye sobre los intentos de derogar la extremadamente homofóbica ley SSMPA de Nigeria; de Hauwa Shaffii Nuhu sobre #ArewaMeToo, #EndSARS, y más".
Penney también cuenta que dos meses después de que Nosmot Gbadamosi informara sobre los esfuerzos para presionar al Museo Metropolitano de Arte de Nueva York para que devolviera su colección de Bronces de Benín, el Museo anunció que enviaba dos piezas de vuelta a Nigeria. Además, añadió: "nuestra investigación sobre los ataques aéreos franceses contra civiles en Malí sigue siendo el informe más profundo sobre el tema en los nueve años transcurridos desde que Francia intervino en el país".
Las audiencias
A través de su trabajo multimedia, el Sahelien experimenta con formatos más atractivos para satisfacer las necesidades y demandas de su audiencia. El medio también organiza eventos comunitarios, como proyecciones de películas y conversaciones, que ayudan a concientizar sobre los problemas del Sahel.
Por encima de todo, Amobi está de acuerdo en que África necesita más historias impactantes, contadas desde las perspectivas adecuadas. "Uno de los problemas que carcome a África es la estructura amorfa de nuestras instituciones", dice. "Solo se puede corregir cuando se escriben historias sobre ellas; para que las instituciones se den cuenta de que la gente es muy consciente de estos problemas y exija un cambio".
Foto de Lucas George Wendt en Unsplash.