El modelo de membresía crea relaciones sólidas con las audiencias

por Tanya Mariano
Jun 24, 2019 en Periodismo digital
Membership puzzle

En tiempos en que las redacciones se esfuerzan por hacer más con menos recursos, muchas han optado por mirar más allá de la publicidad, las suscripciones y otras fuentes tradicionales de ingresos.

Una opción que puede ser la clave para atraer a las audiencias de manera más significativa y lograr la sostenibilidad es el modelo de membresía.

Pero este modelo no es solo de negocio; es más bien un contrato social entre los periodistas y quienes los apoyan, dice Emily Goligoski, directora de investigación del Membership Puzzle Project de la Universidad de Nueva York. Los miembros contribuyen no solo con dinero, sino también con tiempo, energía y experiencia, y los medios deben rendir cuentas ante ellos.

Hablando en Splice Beta sobre el Membership Puzzle Project y los logros clave de su investigación, Goligoski dijo: "Creemos que estaremos mejor preparados para crecer si logramos alinear nuestros incentivos comerciales con los incentivos de nuestros usuarios".

La suscripción es transaccional. La membresía construye relaciones

Para ilustrar mejor qué es una membresía, Goligoski la compara con el sistema de suscripciones: “La suscripción es una transacción: pago dinero a una publicación que me da acceso a sus archivos digitales y una copia de su revista. Ese acceso es el núcleo de nuestra relación, y comienza y termina ahí. Las membresías, en cambio, dependen de las relaciones”.

Esta relación adquiere formas variadas. Algunas organizaciones como Inside Story de Grecia invitan a los lectores a reuniones editoriales y los alientan a participar en el proceso de reporteo. Otros tienen miembros que trabajan como transcriptores, buscadores de historias, editores de audio o correctores. Varios medios como La Silla Vacía de Colombia publican abiertamente sus reportes financieros. Todas esas cosas ayudan a crear una relación que sería imposible de forjar a través de los enfoques transaccionales más tradicionales.

Los lectores de hoy, de acuerdo con la investigación del Membership Puzzle Project, quieren historias que sean únicas y significativas, y prefieren medios transparentes, confiables y abiertos a intercambiar con ellos. Aquí es donde la adopción de un modelo de membresía puede beneficiar a una redacción.

El camino lo marca la audiencia

En el sudeste de Asia, New Naratif es una de las publicaciones que escucha a sus miembros.

"Desde que iniciamos el modelo hemos virado varias veces basándonos únicamente en lo que dicen nuestros miembros", dice el fundador y director general Thum Pingtjin. "Los escuchamos mucho. Así que buena parte de los productos que tenemos ahora, cómo nos posicionamos, pensamos en la compañía y entendemos lo que hacemos, se debe a los comentarios de los miembros".

Es este feedback el que ha llevado a New Naratif a expandirse desde lo digital a audiolibros y ediciones impresas. "Nos dimos cuenta de que el producto meramente digital deja fuera a muchas personas. Personas con discapacidades visuales, por ejemplo, o personas mayores que no leen en sus teléfonos o que no pueden pagar por teléfonos o computadoras. Ellos también deberían tener acceso a la información", dice Thum.

La publicación, que para Thum es fundamentalmente un movimiento por la democracia y la libertad de información en el sudeste asiático, publica sus reportes financieros cada seis meses e invita a los miembros a asistir a reuniones y contribuir con su experiencia. A cambio de sus contribuciones, New Naratif ofrece membresías gratuitas, o extiende membresías existentes por varios meses o incluso un año.

Una gran opción, pero no para todos

Debido a que es una opción muy centrada en la audiencia y sensible al contexto, no hay un solo modelo correcto. El modelo de membresía puede funcionar bien para medios de comunicación dedicados a la investigación, dice Goligoski, pero tal vez no tanto para medios que cubren estilo de vida o cultura.

A su vez, puede ser más difícil de implementar que las opciones tradicionales. "Un modelo de membresía necesita que los medios sean más abiertos y escuchen más de lo que han hecho nunca", dice Goligoski.

"No es un modelo que vaya a funcionar bien para todos, sino para organizaciones que están realmente fascinadas por lo que la gente valora e interesadas en trabajar con sus miembros. Si esto ocurre pueden hacer una muy buena pareja con sus audiencias", explica.

Para New Naratif, este modelo se fusiona con su filosofía. Thum dice: "Ganamos muy poco dinero y administramos todo con muy poco dinero. Pero somos un medio basado en valores. Estamos organizados como una asociación de miembros, por lo que no hay accionistas, nunca podremos vender nada y nadie podrá enriquecerse. Todos tienen que estar de acuerdo con los mismos valores. De lo contrario, ¿para qué estamos haciendo esto?”


Este artículo fue publicado originalmente en Splice y es reproducido en IJNet con permiso.

Tanya Mariano es una periodista freelance con sede en Manila que cubre startups, emprendimientos, viajes, estilo de vida y cultura. También trabaja con una ONG que empodera a las comunidades locales a través de proyectos de desarrollo de la resiliencia.

Imagen con licencia Creative Commons en Unsplash, vía Hans-Peter Gauster.