En Cuba, "el paquete semanal" puede transportar muchas cosas diferentes. Puede tomar la forma de un disco duro externo o CD con la última temporada de la serie de HBO Girls, la telenovela mexicana del momento, la última edición digital de The New York Times o la revista de chismes española ¡Hola!.
El paquete semanal, un servicio clandestino de contenido offline distribuido a domicilio o repartido de mano en mano del que nadie conoce bien su origen, es la forma que los cubanos encontraron para tener acceso a fuentes de información y programas de TV que no están disponibles en la isla.
"En Cuba nos leen a través del mercado ilegal de información", dice en entrevista con IJNet Yoani Sánchez, una de las primeras blogueras cubanas y fundadora del sitio de noticias 14ymedio.com.
Alrededor del 5 por ciento de la población tiene acceso a Internet y el gobierno la censura ampliamente: el país ha sido considerado como un “enemigo de Internet” por Reporteros sin Fronteras cada año desde que la lista fue creada en 2006.
Es en ese contexto que hace un año Sánchez decidió comenzar un audaz experimento: fundar un sitio digital de noticias.
"Ha sido como dar a luz a un niño", dijo.
Cansada de los diarios oficiales, que sólo imprimen lo que el gobierno considera oportuno, y de la prensa opositora, Sánchez quiere seguir lo que ella llama un tercer camino independiente que aspira a producir periodismo profesional y de calidad.
Ésta no es la primera vez que experimenta con los medios digitales. Ella se convirtió en una voz influyente después de comenzar Generación Y en 2007, un blog personal que documentaba la vida en la isla. El blog ganó rápidamente una audiencia internacional (llegó a tener 1,2 millones de visitas en febrero de 2008) y ahora es traducido en 17 idiomas.
Bloguear en un país donde el acceso a Internet es escaso y caro no fue fácil. Sánchez enviaba sus posteos por correo electrónico a sus amigos que vivían fuera de la isla para que pudieran publicar en su blog y llegó a ser detenida por el gobierno debido a su activismo.
Pero el mundo exterior estaba mirando, y Sánchez obtuvo reconocimiento mundial y numerosos premios: ganó el prestigioso Premio Ortega y Gasset de Periodismo y en 2008 fue nombrada una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista TIME.
Con 14ymedio Sánchez quiere asegurarse que los cubanos puedan obtener la información necesaria para tomar decisiones como ciudadanos informados en una Cuba post-Castro.
El tipo de periodismo que predica parece básico para cualquier persona que viva en un país con una prensa libre: depender de fuentes creíbles y valorar la información sobre la opinión o propaganda.
"En Cuba nos estamos ahogando en opiniones. Hay 11 millones de cubanos y 30 millones de opiniones (...). Estamos tratando de enseñar a la gente a practicar otro tipo de periodismo", dijo.
Ella sabía que no iba a ser fácil. Los cubanos tienen acceso a un servicio de correo electrónico básico pero no pueden tener una conexión abierta a Internet en sus domicilios. Sólo pueden conectarse en hoteles, que cobran 5 dólares la hora. Aún cuando logran conectarse, la velocidad es lenta y muchos sitios web están bloqueados, explicó.
Entre la censura (el sitio 14ymedio está bloqueado en la isla) y la baja penetración de Internet, ella y su equipo de 11 personas se propusieron encontrar formas creativas para conseguir hacer llegar la información a su audiencia.
14ymedio.com tiene 315.000 visitas por mes de usuarios fuera de Cuba. Las personas dentro de la isla acceden al sitio a través de servidores proxy o versiones en PDF distribuidas a través del "paquete semanal".
A pesar de que aún no se sabe cuántas personas leen a través del paquete semanal, el equipo de 14ymedio se da cuenta cuándo una noticia publicada en el sitio “tocó un nervio” porque el gobierno sale a responderla.
Del mismo modo, Sánchez tuitea las historias publicadas en el sitio a sus más de 660.000 seguidores a través de un servicio llamado Tweetymail.com, que publica sus tuits por correo electrónico.
Ahora que EE.UU. está restaurando sus lazos con Cuba y la isla se está abriendo al resto del mundo, todos los ojos están puestos en su transición.
Sánchez es muy consciente de este momento histórico y quiere asegurarse de que su redacción esté preparada para ello. Quieren obtener más formación en cómo crear periodismo multimedia, buscar un modelo de negocio sustentable y convertirse en una sala de redacción profesional que se adhiera a horas de cierre.
Por miedo a la represión, los periodistas profesionales en Cuba deciden no trabajar de manera independiente, explicó Sánchez, por lo que la mayoría de los que trabajan para 14ymedio no son periodistas de formación.
"Hemos estado trabajando (este primer) año a puro corazón", dijo ella. "Cuando tienes algo que decir, encuentras la forma".
Imagen con licencia Creative Commons, vía Yahoo.