La periodista yemení Huda Harbi ha dedicado su carrera a luchar por los derechos de las mujeres y las periodistas en su país. Lo ha hecho con el telón de fondo de la guerra civil en curso en Yemen, un clima excepcionalmente peligroso para los periodistas.
La carrera periodística es un reto para las mujeres periodistas, especialmente en Oriente Medio. En un campo tradicionalmente dominado por los hombres, que ocupan alrededor de dos tercios de los puestos de reporteros, las mujeres a menudo luchan por abrirse camino. Las mujeres periodistas también deben hacer frente a las crecientes amenazas a su seguridad, tanto en línea como en persona.
A pesar de los riesgos, una nueva generación de mujeres periodistas árabes ha perseverado contra viento y marea no solo para informar sobre sus comunidades, sino también para elevar las voces de sus compañeras. Harbi está entre ellas y, en 2019, fundó Neswan Voice, una plataforma dedicada a amplificar las voces de las mujeres en Yemen.
"Se centra en romper los tabúes de los roles predeterminados para las mujeres, lo que demuestra que las mujeres no carecen de inteligencia, ni de motivación para conseguir logros, al igual que los hombres", dijo la periodista.
Le pregunté a Harbi cómo empezó a trabajar como reportera, a qué retos se enfrentan las mujeres periodistas en Yemen y el papel de Neswan Voice a la hora de poner de relieve las perspectivas de las mujeres en el país. Esto es lo que me contó:
¿Cómo empezaste tu carrera en el periodismo?
La inicié durante mi segundo año en la universidad, después de que me dieran la oportunidad de trabajar en una emisora de radio local privada en línea [FM Shabab], que fue la primera emisora de radio comunitaria local para jóvenes [en Yemen]. Presentaba un programa centrado en temas juveniles e intentaba transmitir la voz de los jóvenes a las autoridades.
En mi trabajo en la radio tenía muchas tareas y cargos entre los departamentos. Me movía la pasión y mis capacidades hicieron que mis jefes confiaran en mí. En mi trabajo en la radio pasé de locutora a guionista de radionovelas, ingeniera de sonido y directora. Más tarde me convertí en directora de [FM Shabab], y fui la primera mujer yemení en ocupar ese cargo.
A finales de 2016, Yemen se debatía entre la guerra y su impacto en la sociedad, sobre todo en los periodistas. En aquel momento, tuve que dejar definitivamente el trabajo en la radio, temiendo por mí, por mi familia y por todos los que me rodeaban. El país estaba en estado de guerra, había caos de seguridad y nadie podía protegerme.
¿Cómo es ser periodista mujer en Yemen? ¿A qué retos concretos te has enfrentado?
Siendo periodista y viviendo en un entorno de alto conflicto como Yemen, esperas que el destino de tu vida sea el encarcelamiento, el asesinato o el exilio. Nuestras vidas están llenas de miedo y ansiedad. El problema no es que encarcelen a un periodista acusado de realizar su trabajo periodístico, sino que la acusación se convierta en un caso de difamación [contra el periodista].
[Esto afecta] no sólo a la reputación de la familia y la tribu a la que [el periodista] pertenece, sino que el periodista también puede ser asesinado. El incidente podría quedar sin resolver, sin que nadie rinda cuentas.
¿Cómo ha ayudado IJNet en tu carrera?
Fui una de las afortunadas periodistas que participaron en el Centro de Tutoría de IJNet Árabe en 2021-2022. Me beneficié mucho de esta oportunidad y aprendí sobre desarrollo de medios, estrategias de sostenibilidad y elaboración de contenidos.
En 2019 lancé Neswan Voice con un grupo de mujeres periodistas en Yemen, cuyo objetivo es amplificar las voces de las mujeres en el país. Sigo aplicando las habilidades y conocimientos que obtuve de IJNet en mi trabajo diario.
¿Con qué problemas a los que se enfrentan las mujeres periodistas en Yemen te has familiarizado a través de tu trabajo en Neswan Voice?
Las periodistas yemeníes se enfrentan a muchas dificultades en su trabajo, entre las que destacan la violencia y las amenazas de las partes en conflicto o de grupos armados. Esto las pone [a las mujeres periodistas] en grave peligro y les impide llevar a cabo su trabajo con eficacia. Las periodistas son víctimas de robos, asesinatos y secuestros. Se enfrentan a muchas restricciones en su trabajo, ya que la libertad de prensa está restringida por las autoridades o los grupos extremistas.
A las periodistas yemeníes les resulta difícil entrar en algunas zonas conflictivas del país para cubrir los acontecimientos, ya que tienen dificultades para obtener los permisos necesarios. El acceso al transporte y a los medios de transporte en Yemen es un gran problema, especialmente para las periodistas que necesitan desplazarse entre ciudades y regiones. Además, se enfrentan a otros retos que incluyen la falta del equipo necesario y las dificultades para editar y publicar los materiales de los medios de comunicación en todo momento.
¿Cómo crees que Neswan Voice está amplificando las voces de las mujeres?
La plataforma destaca el papel de la mujer y conceptos relacionados con sus derechos a la educación, la participación social y política, la ocupación de cargos públicos, la elección de marido y la maternidad, entre otros.
Utiliza diversos formatos periodísticos como reportajes, historias positivas, motion graphics, vídeos, infografías, dibujos animados y podcasts. Esta diversidad en la producción de contenidos nos ayuda a llegar al mayor segmento del público objetivo.
Esta entrevista fue realizada originalmente en árabe y traducida al inglés por Sarah Abdullah. Se editó para mayor claridad.
Imágenes cortesía de Huda Harbi.