Fact-checking en el mundo: dentro de Faktograf, de Croacia

Oct 30, 2018 en Lucha contra la desinformación

Esta es la tercera entrega de nuestra serie "Fact-checking en el mundo", que destaca a las organizaciones que luchan contra la desinformación. También puedes leer la primera parte o la segunda parte.

El periodista de larga trayectoria Petar Vidov estaba cubriendo la corrupción política y el crimen organizado para Index, el portal de noticias más visitado de Croacia, cuando le llamó la atención una incipiente operación de fact-checking. Dejó su trabajo de alto perfil para ayudar a hacer realidad esa startup.

Hoy Faktograf es parte de la Red internacional de Fact-Checking y firmante del código de principios de fact-checkers que enfatiza el compromiso con el no partidismo, la imparcialidad y la transparencia de las fuentes en todo el mundo. Faktograf, lanzado en octubre de 2015, ha dado a conocerse en la escena mediática de los Balcanes.

Según Vidov, el sitio web recibe entre 30.000 y 40.000 visitas únicas por mes y tiene una fuerte presencia en Facebook y Twitter. Los hallazgos de Faktograf se televisan como parte de un programa de noticias dominical matutino en la red N1 -un afiliado de la CNN para la región- y son publicados por los medios croatas.

"Faktograf ha sido muy exitoso en posicionarse como una fuente de información en la que siempre se puede confiar. Estamos muy orgullosos de eso", dijo Vidov. "Gradualmente estamos atrayendo a más y más lectores que habitualmente nos contactan, principalmente a través de Twitter, con sugerencias sobre temas para verificar o investigar".

Stjepan Malovic, destacado estudioso de medios y escritor croata, elogia a Faktograf y sus homólogos de todo el mundo. Él ve el "periodismo de responsabilidad" como la primera línea en la guerra contra las noticias falsas y la desinformación, y llama a Faktograf "un excelente sitio web" que mantiene a los políticos contra las cuerdas.

"La gente de todo el mundo está cansada de las noticias falsas y otros inventos de compañías corporativas de medios y gurús de redes sociales", dijo Malovic, coautor de un libro de texto sobre ética de medios. "Proyectos como Faktograf están tratando de detener la marea, pero es un proceso lento y doloroso. Es por eso que merecen nuestro apoyo".

Desde el principio, Faktograf ha sido un esfuerzo de colaboración con otras iniciativas de fact-checking en la región que han brindado asesoramiento y capacitación.

La iniciativa es un proyecto conjunto de la Asociación de Periodistas de Croacia y GONG, una organización civil enfocada en la responsabilidad y buena gestión gubernamental. Vidov reconoce que Jelena Berković, directora ejecutiva de GONG, inició la operación inspirada en proyectos similares en países vecinos.

Los colegas al otro lado de la frontera en Bosnia-Herzegovina llevan adelante una operación de fact-checking llamada Istinomjer que ayudó a Vidov a crear un modelo funcional para Croacia. Su departamento de tecnología de la información contribuyó con el diseño y el lanzamiento del sitio web de Faktograf.

Faktograf es financiado por fondos de la National Endowment for Democracy y Google Digital Initiative Innovation Fund.

"Sentimos que el impacto que hemos tenido es significativo, pero también limitado", dijo Vidov. "Significativo porque Faktograf ha tenido una influencia positiva en el panorama general de los medios en Croacia y ha sido muy bien recibido por los lectores".

"Limitado porque somos una pequeña redacción. Sólo podemos darnos el lujo de contratar a tres periodistas, pero la máquina de crear noticias falsas funciona las 24 horas del día. A menudo es difícil mantenerse al día con todas las mentiras y la desinformación que se encuentran en el camino de la discusión pública". 

Él destaca tres realidades para los fact-checkers:

  • Las noticias falsas y la propaganda son mucho más fáciles y baratas de producir que los informes precisos y honestos.

  • La desinformación se propaga mucho más rápido y es más difícil de refutar.

  • Los periodistas y los fact-checkers en su mayoría han estado enfrentando esta batalla solos.

"La única forma de hacer frente a la propaganda digital omnipresente es respondiendo con hechos concretos e indiscutibles", dijo Vidov.

Mientras el parlamento de Croacia debatía la ratificación de la convención del Consejo de Europa sobre la violencia de género, los opositores difundían falsedades sobre cómo la ratificación socavaría los valores familiares en el país. Faktograf desacreditó esa campaña de desinformación.

Hubo casos en que los políticos se corrigieron después de que Faktograf verificara sus declaraciones y demostrara que eran incorrectas. Recientemente Faktograf expuso la falsa declaración de un miembro del parlamento sobre alimentos genéticamente modificados. Su partido político se disculpó y cambió su posición. Vidov está en contacto regular con otros fact-checkers en su área y espera "una colaboración aún más estrecha en proyectos comunes siempre y cuando surja la oportunidad".

Poco después del lanzamiento de Faktograf, el Poynter Institute for Media Studies publicó una historia: "En los Balcanes, el fact-checking no conoce fronteras".

El autor, Alexios Mantzarlis, jefe de la Red Internacional de Fact-Checking, señaló: "Los fact-checkers suelen ser de tipo colaborativo, ejecutan iniciativas conjuntas y apoyan los sitios web de noticias que lanzan en todo el mundo". Mencionó a Faktograf como un ejemplo de ello.

En el futuro, Vidov visualiza una redacción más amplia con periodistas dedicados y profesionales que trabajan a tiempo completo. "Desafortunadamente, dicha expansión no es tan fácil de planificar, ya que somos una empresa sin fines de lucro, financiada exclusivamente por donaciones de donantes internacionales", dijo. "En este momento, estamos haciendo que los ingresos se mantengan año tras año".

Imagen principal con licencia CC de Unsplash, a través de Toa Heftiba.