Como periodista de negocios en el Philadelphia Inquirer, Diane Mastrull ha informando sobre las empresas de todo Filadelfia desde 2008.
Si bien algunos piensan que el periodismo económico es insípido, Mastrull cree que estas coberturas en realidad pueden dar cuenta de historias sobre la fuerza de voluntad y el coraje. Mientras que en muchas redacciones la sección de negocios no recibe tantos recursos como otras, Mastrull ha descubierto que la mejor manera de abordar el periodismo de negocios es trabajando duro, basarse en su experiencia como periodista judicial, y añadir una dimensión humana a sus historias con el fin de captar la atención de su audiencia.
Durante una charla con IJNet, Mastrull compartió lo que ama de su trabajo, lo que la frustra, y algunos consejos para conectarse con los protagonistas de sus historias y con el público.
"Temas sombríos"
Mastrull se pasó buena parte de su carrera cubriendo política y casos judiciales. Lo que le causaba rechazo de este trabajo eran las historias trágicas y traumáticas, cuenta.
“Lo que me gusta del periodismo de negocios es que no tengo que lidiar con esas cosas”, dice.
Sin embargo, el periodismo económico también le dio coberturas difíciles, como la recesión de Estados Unidos en 2008. “Eran historias sobre gente perdiendo su trabajo, sobre reducciones de personal y bancos fusionándose. Fueron temas sombríos”.
Un periodismo que lo reúne todo
La economía no es un tema que pueda ser manejado de manera aislada, porque muchos otros temas – educación, salud, viajes, matrimonio, divorcio– están conectados con el dinero de una manera u otra, dice Mastrull. "Se mezcla todo", añadió.
Esta es en parte la razón por la que Mastrull recurre a su experiencia como periodista judicial. La capacidad de encontrar y analizar documentos relevantes –tales como registros de quiebra– la ha servido para hacer coberturas más sustanciosas.
El elemento humano
El público tiende a estar más interesado en las historias de la gente detrás de las empresas que de la propia empresa, lo que contradice la percepción general de que el periodismo negocios es aburrido, seco y eminentemente estadístico.
Mastrull cree que la gente quiere saber lo que motivó a las personas exitosas, y también a qué obstáculos tuvieron que hacer frente con el fin de llegar a donde están. Si bien hablar de negocios es hablar sobre economía, el reporteo y las buenas habilidades narrativas siguen siendo necesarias.
"Las empresas son en gran medida la gente que está detrás de ella", sostiene Mastrull. "Todos tienen una historia sobre lo que los llevó a hacer lo que están haciendo y a veces son realmente sorprendentes”.
Un periodista de negocios no es un promotor de negocios
El año pasado, Mastrull escribió sobre dos mujeres que lanzaron un desodorante natural. Su primera historia se centró en cómo las dos amigas se unieron y decidieron hacer negocios juntas. Sin embargo, en el seguimiento de su historia contó sobre los problemas que habían tenido al cambiar de fabricante y sobre clientes que no recibían sus pedidos a tiempo.
En esta segunda historia, Mastrull no pudo darle a las protagonistas la cobertura positiva de la vez anterior. Como periodista de negocios debía darle a los lectores información precisa, y hacerle publicidad a un emprendimiento no es la misión de un periodista, explica.
Conectarse con el público
Mastrull admite que no logra dominar las redes sociales como otros periodistas, pero que se ha ido adaptando con el fin de conectarse con sus lectores. En el Inquirer constantemente se impulsa al staff a que esté en Twitter, Facebook e Instagram.
“Los periodistas son personas que suelen esconderse detrás de la firma”, dice. “La gente no sabía quiénes éramos y nos gustaba así. Ahora se nos urge a hacernos auto marketing para que la audiencia sienta una conexión con nosotros y nos siga leyendo”.
Educación en negocios
Mastrull no tiene un título académico en negocios, comercio o economía, pero considera que la búsqueda de estos títulos es muy importante para quienes deseen cubrir negocios. Lo mejor que los aspirantes a este tipo de periodismo pueden hacer es conseguir un título académico relacionado, explica, con el fin de comprender el lenguaje único de los negocios.
"Si eres un periodista que se dedica a la economía y los negocios, es de mucha ayuda dominar mejor la materia de tu trabajo”, dice. “Es una tremenda desventaja no contar con ese tipo de educación. Cuanto más conocimientos sobre economía tengas, más astuto serás”.
Imagen con licencia Creative Commons en Flickr, vía Bernd Zube. Imagen secundaria cortesía de Diane Mastrull.