Casi cualquier documental rodado con un equipo de filmación costoso puede generar impacto, pero cuando una película digna de ganar varios premios fue filmada solamente con un teléfono móvil, eso es una hazaña.
Los ganadores de la categoría de no ficción del Original iPhone Film Festival (Festival de cine de iPhone original) demuestran que los periodistas no necesitan mucho para contar grandes historias.
Estos cineastas en ciernes utilizan una variedad de técnicas para hacer frente a las limitaciones de este equipo de bajo costo.
El ganador del primer lugar, Michael Guhil de Filipinas, nunca había usado un iPhone para filmar una historia y mucho menos para una pieza de no-ficción. Usando lo que él describe como un “estudio móvil en el bolsillo”, él abordó un problema real con un teléfono que ni siquiera era suyo.
El evidente desequilibrio entre la verdad y la realidad provocó que Guhil pidiera prestado un iPhone y analizara el lugar donde se crió, un kalapukan o "lodazal", una “realidad que podría ser considerada única a los ojos de gente proveniente de países extremadamente civilizados y desarrollados”, dijo.
Mientras que algunos lo describen como un viaje audaz a un destino exótico, Guhil muestra cómo es el verdadero día a día en la vida de las personas en este pueblo filipino en Dinas: la cruda realidad de vadear fosos con lodo hasta el muslo, el plantar cultivos a mano y ver cómo una muchacha vestida con jeans, blusa y bolso es transportada en un bote a remos para que no se ensucie. En la película, Guhil llama a esta manera sencilla de vivir un “recuerdo de la raíz de la vida”.
Kalapukan (lodazal) No-Ficción del Original iPhone Film Fest en Vimeo.
Prashant Rao, periodista de la Agence France Presse, consiguió el tercer lugar con esta representación de una tradición iraquí denominada "Mheibes". Después de la puesta del sol y en ayuno estricto, los hombres iraquíes se reúnen para este tradicional juego celebrado durante Ramadán.
La película de Rao ofrece una visión singular de la sociedad iraquí porque sólo los hombres tienen permitido ver y participar en el juego.
Rao viajó con varios periodistas de AFP para llevar a cabo lo que él denominó un experimento. Esta fue su primera vez haciendo un cortometraje.
Usando una combinación de una cámara réflex Canon 550D SLR y su iPhone, Rao filmó una hora de video que según él no habría sido posible si estuviera trabajando en una historia para la agencia a la misma vez debido a la cantidad de atención que requiere mantener un ojo constante en las imágenes.
“No estás absorbiendo todo cómo lo haría un reportero impreso y es más difícil tomar notas en el momento”, dijo. “No creo que sería posible hacer ambas cosas al mismo tiempo, sobre todo en noticias de último momento. Tendría que ser una crónica de este tipo que no tenga la presión del tiempo”.
Habiendo trabajado en Irak desde 2009, Rao estaba acostumbrado al típico reportaje desde Bagdad: violencia, política y cosas de ese estilo. Así que vio esto como una oportunidad de mostrar un lado más amable de la ciudad y usó el ambiente de fondo de la ciudad a la noche para mostrarlo, usando sólo subtítulos y prescindiendo de una voz narradora.
“Pensé que esto era una historia interesante aparte. Creo que este tipo de ruidos de Bagdad son algo interesante que la gente no llega a conocer”.
Ambos realizadores enfrentaron algunas limitaciones durante el rodaje. Guhil hizo frente al “nerviosismo e inestabilidad” del iPhone, pero dijo que por lo general utiliza equipos sencillos a pesar de los contratiempos.
“Puede haber diferencias evidentes en la calidad y presentación, pero lo importante es el mensaje que se quiere transmitir a la mente de la audiencia”, dijo.
Rao filmó una película de 3 minutos en su SLR sobre el mismo tema que, admite, salió mejor que el video del iPhone, pero adora el teléfono ya que, en su opinión, se trata de una “cosa pequeñita (…)” que hace que sea más fácil para los periodistas pasar desapercibidos y ser menos intrusivos.
Él también tuvo que lidiar con la pérdida de sonido si sostenía la cámara en un “ángulo extraño”, lo que le hacía ver la necesidad de un trípode o algún tipo de estabilidad.
Mheibes - No-Ficción from Original iPhone Film Fest en Vimeo.
Una vez que Guhil consiga un iPhone propio, dijo que planea hacer documentales más cortos porque “la verdad suele ser más atractiva que la ficción”.
A los periodistas que aspiran a usar cámaras de video, Guhil sugiere pensar “qué se adaptará mejor a las necesidades de equipo sin comprometer tu presupuesto, tomando ventaja de la revolución que estamos experimentando ahora en términos de tecnología”.
“Lleva tu iPhone a todas partes”, insiste Rao. El dispositivo no funciona ni siquiera como un teléfono en Irak, pero él lo ve como una “cámara [de fotos] y una cámara de video” que se utiliza para capturar noticias de última hora sobre el terreno.
Ahora que Rao como periodista de prensa se subió al carro de cine, no piensa dar marcha atrás.
“Me asusta menos ahora activar la función de video en mi SLR o usar la aplicación de video en mi iPhone, mientras que antes pensaba que era sólo una pérdida de tiempo y que no lo estaría usando en el futuro”, dijo. “Ahora puedo ver el valor, y no sólo porque he ganado este pequeño premio”.
Fundado por Matt Dessner y Corey Rogers, el primer Original iPhone Film Festival contó con importantes patrocinadores como Macworld, Maroon 5, Red Giant, entre otros. Puedes consultar el blog de su fundador para saber más sobre los preparativos del festival 2012.