Hoy en día, en la era de las distracciones, muchos de nosotros ya nos hemos alejado de nuestra capacidad para mantener la atención, metidos con los ruidos interminables y repiques de los textos, móviles, Twitter y…
¡Ah!, lo siento. Me distraje...
Hay que aceptarlo: la mayoría de personas no tienen el tiempo ni la capacidad para mantener la atención para leer el periodismo narrativo (también conocido como periodismo literario o nuevo periodismo). A diferencia de los artículos noticiosos sólidos, los cuales responden al quién/qué/dónde/cuándo/por qué de la noticia, los artículos narrativos pueden tener una extensión de hasta 8.000 palabras. Existen incluso abreviaturas debido a la falta de tiempo para leer estos artículos en la Internet, como “ktl, salu2” o “¿qué tal?, saludos”.
A pesar de que, ciertamente, no exista en la Internet un periodismo narrativo de gran extensión, el desafío es hacer que los lectores se sientan y lean (¿s;l?). (Véase el caso de Slate sobre el periodismo narrativo aquí [ inglés]).
Esta semana, Mallary Jean Tenore de Poynter exploró algunas de las nuevas herramientas ideadas para conseguir que leamos artículos de periodismo narrativo en la Internet y los responsables de las herramientas. Dirigir el enfoque hacia los artículos de periodismo narrativo por la Internet “puede brindarles a los editores más motivos para producirlos”, concluyó Tenore.
¿Utiliza alguna de estas herramientas? De no ser así, ¿lo haría? Díganos lo que opina.