El boom del periodismo de investigación en Sudáfrica parece estar amainando, mientras las redacciones recortan sus presupuestos para equilibrar sus cuentas y para poder continuar pagando dividendos a sus accionistas.
En los últimos años, todos los grandes medios del país han establecido unidades de investigación con periodistas senior que contaron con recursos y tiempo para montar grandes investigaciones. Estas piezas son, para el prestigioso certamen de investigación Kuiper Taco, un testimonio de la calidad del trabajo que todavía se está produciendo.
“Sudáfrica ha tenido una época dorada de periodismo de investigación, con cuatro equipos de diferentes instituciones dedicados a esta labor”, dijo el profesor Anton Harber, jefe del Departamento de periodismo de la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo.
“Lamento decir que algunos de estos equipos han sido desmantelados en los últimos meses debido a presiones financieras, por lo que me temo que esta tendencia –la más productiva que hemos tenido en el país– se esté desacelerando”.
Pero no todo es tristeza y abatimiento, agrega: "En toda África hay espacios que han producido un excelente trabajo, impulsado sobre todo por individuos dedicados y valientes".
Harber habló después de la 10ª Conferencia Power Reporting, organizada recientemente por su Universidad. “Power Reporting comenzó como una pequeña conferencia local hace una década y ha venido creciendo hasta convertirse en el punto focal de la comunidad de periodismo de investigación africana y en el brazo continental de la Red Global de Periodismo de Investigación”, afirmó.
La conferencia ha contado siempre con tres funciones: capacitar a periodistas en nuevas herramientas de investigación, destacar los trabajos más interesantes que se han realizado en África y fomentar la cooperación transfronteriza. El evento ofrece un programa de tres días con talleres prácticos, grandes oportunidades para construir redes, y presentaciones de periodistas extranjeros y locales acerca de los reportajes de investigación que han realizado.
Entre ellos este año estuvo Jonathan Calvert, jefe del galardonado equipo de investigación Insight, del London Sunday Times. Calvert realizó un trabajo encubierto con su colega Heidi Blake para exponer la corrupción en la FIFA. Un gran avance en su investigación vino cuando una fuente les entregó miles de documentos de la FIFA, incluyendo recibos, registros de pagos y documentos internos.
Pero la cantidad de documentos era tan grande que tuvieron que recurrir a expertos en datos para que los ayudaran a extraer y analizar la información, dijo Calvert. "Pasamos semanas trabajando en secreto fuera de la oficina. Desaparecimos durante semanas y la gente preguntaba qué nos había pasado”.
El periodista Edouard Perrin dejó hechizados a los asistentes mientras explicaba su investigación LuxLeaks, que expuso cómo el paraíso fiscal de Luxemburgo asistía a las marcas más importantes del mundo para que no pagaran impuestos. Después de obtener un acceso sin precedentes a acuerdos fiscales secretos, Perrin pasó tres años desentrañando cómo las gigantes multinacionales se enriquecían a través de la multimillonaria "industria de la evasión de impuestos".
La investigación periodística puede ser peligrosa y a veces tiene un precio alto para los periodistas. El editor de Suazilandia Bheki Makhubu, por ejemplo, fue encarcelado por una serie de artículos en los que escribió sobre el poder judicial de su país y el jefe de su tribunal supremo.
Makhubu leyó la ponencia anual en memoria de Carlos Cardoso durante la conferencia Power Reporting. La ponencia rinde homenaje a un valiente periodista que denunció sistemáticamente la corrupción en Mozambique y pagó con su vida. Makhubu fue encarcelado junto al abogado de derechos humanos Thulani Maseko en 2014. Habían cumplido 15 meses dentro de la cárcel cuando un tribunal ordenó su liberación en junio pasado.
“¿Tengo miedo de escribir lo que creo que está bien? No, no lo tengo. Hoy creo muy fuertemente que la verdad es el libertador contra la tiranía... Voy a seguir diciéndole la verdad al poder”, dijo.
La conferencia terminó con una gran noticia: Harber anunció durante la ceremonia de clausura que la Conferencia Mundial de Periodismo de Investigación se realizará Johannesburgo en 2017.
“Muchos de nuestros colegas hacen un increíbe trabajo en circunstancias muy difíciles, y esta conferencia -que reunirá cerca de 1.000 de los mejores periodistas del mundo en África por primera vez- es una gran oportunidad para destacar su labor y darles apoyo y aliento”, dijo Harber.
Imagen de Anton Harber (izquierda) y Bheki Makhubu (derecha), tomada por TJ Lemon.