El aumento de la desinformación es un gran problema para las democracias de todo el mundo. La información falsa difundida en redes sociales y servicios de mensajería como WhatsApp y Telegram, puede socavar la fe en las elecciones y en el proceso democrático y poner en peligro los traspasos políticos de poder. En Brasil, la difusión de desinformación supondrá un riesgo sustancial para la confianza pública en el resultado de las elecciones presidenciales de este año, con falsas acusaciones de fraude electoral, por ejemplo, que ya están proliferando.
En este contexto, el Centro Internacional de Periodistas, en colaboración con Youtube Brasil, seleccionó seis medios para financiar y asesorar como parte de la iniciativa "Jogo Limpo", que apoyará soluciones innovadoras para combatir la desinformación en el período previo a las elecciones.
Así es como estas redacciones luchan contra la desinformación en Brasil y crean un juego limpio para los votantes:
Fact-checking de candidatos
"Durante los últimos cuatro años, la desinformación ha sido el tema más importante de la política. Y creo que también jugará un papel en las próximas elecciones", afirma Bruno Favero, director de crecimiento de Aos Fatos. A medida que la campaña para la presidencia de Brasil se acelera, los mítines políticos, los debates presidenciales y las entrevistas presentan la oportunidad para que los candidatos hablen sobre una amplia variedad de temas —y para que difundan desinformación.
En Aos Fatos, la transcripción y verificación de los discursos del actual presidente Jair Bolsonaro a lo largo de su gobierno consumió mucho tiempo y recursos que podrían haberse dedicado a otras formas de periodismo. Su solución: crear una herramienta de transcripción gratuita y pública para fact-checkers, periodistas e investigadores, formando un "registro público" de los discursos para su posterior análisis.
"Estamos recopilando todas las entrevistas y discursos de los principales candidatos. Y los ofreceremos en una página pública de acceso gratuito", dice Favero. El objetivo es reducir la carga de trabajo de las redacciones, al tiempo que se ofrece al público una forma sencilla de verificar los discursos en busca de posibles informaciones falsas o erróneas.
Para O’Liberal, un medio del estado amazónico de Pará, las elecciones también presentan una oportunidad para que los residentes verifiquen lo que los candidatos dicen sobre la región. "A veces la información presentada por los candidatos presidenciales no es completa. En cambio, vamos a escuchar a personas e instituciones de la Amazonía que estudian y conocen la información por completo y a quienes hacen políticas informadas", dice Daniel Nardin, director de contenidos de O'Liberal.
Durante la temporada electoral, O'Liberal verificará las afirmaciones sobre la Amazonía con la ayuda de expertos de la región. También tiene previsto organizar una entrevista a los candidatos sobre el tema, en la que los medios amazónicos podrán chequear las afirmaciones y las políticas que tienen o planean articular.
"Nuestro objetivo subjetivo es poner más de la Amazonía en la agenda de los candidatos", dice Nardin.
Combatir la desinformación digital
Los candidatos presidenciales no son las únicas fuentes de desinformación en Brasil. La desinformación también puede propagarse fácilmente en línea.
"En 2018, hubo numerosas acusaciones de fraude electoral vía WhatsApp y en redes sociales, y mucha gente empezó a desconfiar del sistema de votación", dice Sergio Spagnuolo, editor de Volt Data Lab. "Para intentar frenar la desinformación necesitamos mejores herramientas".
Núcleo Jornalismo y el programa "Bot Pronto" de Volt Data Lab esperan encontrar palabras y frases clave que a menudo se correlacionan con la desinformación. "Si alguien habla de fraude electoral o de máquinas de votación, identificaremos esas palabras, veremos si han sido utilizadas en el contexto de una posible desinformación, y pediremos a la gente que nos ayude a chequearla", dijo Spagnuolo.
Los verificadores suelen llegar demasiado demasiado tarde, cuando la desinformación ya campea a sus anchas en las redes. "Así que pensamos: invirtamos en el pre-bunking en lugar del debunking", dice Clara Becker, cofundadora de Redes Cordiais.
Para ello, Redes Cordiais forma a influencers para que tengan las herramientas y los conocimientos necesarios para hablar con precisión sobre las elecciones. Por ejemplo, los influencers conocerán los tribunales electorales y verán las máquinas de votación de primera mano para desmentir los mitos que rodean a las papeletas electrónicas u otros supuestos fraudes electorales. "Cuando las audiencias vean información falsa al respecto, ya estarán 'vacunadas'. Ya sabrán que las papeletas son seguras y estarán menos inclinadas a caer en este tipo de deinformación", explica Becker.
Involucrar a los más jóvenes
Conseguir que los jóvenes se comprometan con su democracia es el elemento final para combatir la desinformación. Aunque el voto es obligatorio en Brasil para todos los mayores de 18 años, muchos jóvenes siguen participando mínimamente en las elecciones. Sin embargo, como generación conectada, pueden servir como un importante elemento de control de la desinformación que se propaga en sus comunidades.
"El 92% de los jóvenes brasileños se informan a través de las redes sociales: Twitter, Instagram, Whatsapp", afirma Romeu Loreto, coordinador de desarrollo institucional de Agência Publica. "Las principales agencias de noticias no están llegando al público joven".
Para llegar a ellos, el medio utiliza videos adaptados a un público joven en los que se explica el sistema electoral y se desmontan mitos sobre su funcionamiento. "El objetivo es que entiendan mejor cómo funciona el sistema y cómo utilizarlo para hacer oír su voz", dice Loreto.
Instituto Vero utiliza influencers, redes sociales y tecnología de código abierto para educar a los jóvenes lectores sobre cómo chequear desinformación. La esperanza es crear una generación que pueda verificar hechos para sus familias y comunidades.
"Creemos que esta sociedad va a estar más preparada en general cuando los jóvenes estén mejor equipados para chequear", dice Caio Machado, director del Instituto Vero. "Así, pedir a los políticos que rindan cuentas a todos los niveles será más fácil en el futuro porque la gente estará atenta y más preparada", dijo. "Intentemos que los jóvenes estén mejor preparados y empoderados para que actúen en sus propios espacios".
Juntas, estas seis organizaciones esperan crear una comunidad mejor equipada para combatir la desinformación durante las próximas elecciones. "No creo que la desinformación sea algo que vaya a desaparecer", dice Loreto. "Vamos en la dirección correcta, pero aún queda un largo camino por recorrer".
Imagen de Jorge Franganillo en Unsplash.