Cómo ayudar a periodistas que sufren ataques online

por Megan Clement
Nov 4, 2019 en Seguridad digital y física
Bad words

Cualquier periodista que haya sido trolleado, acosado o atacado en línea sabe lo horrible que puede ser la experiencia y lo aislado que uno puede sentirse. Así las cosas, las redacciones están empezando a tomar conciencia de que su personal necesita apoyo específico para lidiar con el abuso en línea.

En la XI Conferencia Global de Periodismo de Investigación, expertos en seguridad digital compartieron técnicas que los medios pueden implementar en cualquier parte del mundo.

Para Glenda Gloria, editora ejecutiva de Rappler,  publicación filipina miembro de GIJN que ha sido atacada tanto por el gobierno de Rodrigo Duterte como por trolls, combatir la desinformación que se difunde acerca de los periodistas es tan importante para los lectores como para su staff.

“Aun cuando no quieres desacreditar la mentira, tienes que hacerlo por el bien de tu audiencia", dijo Gloria. "Cuando el periodismo está bajo asedio, hay que mantenerse firmes".

Según Scott Griffen, director adjunto del International Press Institute (IPI), con sede en Viena, son numerosas las redacciones que no tienen departamentos dedicados a ayudar a los periodistas a lidiar con los ataques. Pero incluso sin un área de esas características, hay ciertos pasos que cualquier jefe redacción puede seguir para apoyar a los colegas, dijo Jason Reich, quien dirige la seguridad corporativa del New York Times. "Las herramientas para evaluar amenazas están al alcance de todos manos", dijo.

Esto es lo que los medios pueden hacer para asegurarse de que los periodistas hagan su trabajo sin censurarse⁠ o experimentar las consecuencias psicológicas de ser atacados en línea.

Alentar el trabajo periodístico

Las redacciones deben construir una cultura de apoyo que permita a los periodistas denunciar ataques con facilidad, dijo Griffen. Y esa cultura debe imponerse desde arriba. Por ejemplo, los editores deben hacer preguntas de seguridad durante las reuniones editoriales. "Se necesita una gerencia que comprenda que el problema existe y demuestre que apoya a su staff”, señaló. Agregó que es importante que la dirección se asegure de que todos dentro de la redacción sepan qué pasos tomar cuando un periodista es atacado en línea.

Hacer un seguimiento de las amenazas

Los periodistas no deberían guardar material que comprensiblemente puede ser molesto o dañino, pero los líderes de la redacción deben mantener archivos de las amenazas que ha recibido su staff. Esto les permitirá realizar un seguimiento de posibles patrones y reincidencias sin exponer a los periodistas a más malos momentos.

Desmentir

Cuando circulan mentiras sobre periodistas, puede ser tentador ignorarlas bajo el mantra "no alimentes a los trolls". Pero Gloria contó que Rappler había tomado la decisión de desacreditar la información falsa que se publicara sobre sus trabajadores. Dio el ejemplo Pia Ranada, que fue objeto de una campaña de mentiras particularmente cruel. Por un tiempo, contó Gloria, la primera página de resultados de Google para el nombre de Ranada estaba repleta de acusaciones falsas. Ahora, los primeros resultados son sobre ataques a la libertad de prensa.

Investigar

En un entorno como Filipinas, donde los ataques a los medios independientes son alentados por las palabras y acciones del presidente, Gloria dijo que Rappler ha tenido que hacer su propia investigación para descubrir quiénes estaban acosando a sus periodistas. La publicación ha acumulado un archivo de 40.000 cuentas falsas a las que llama "tanque de tiburones" para vigilar las campañas de desinformación contra Rappler.

Formar grupos de colegas

Reich y Griffen señalaron la importancia de formar grupos de colegas en los que los periodistas puedan hablar de las amenazas contra ellos. Ambos citaron a la Reuters Peer Network como un ejemplo de buenas prácticas en este campo, aunque algo tan simple como un grupo de WhatsApp podría ser suficiente. Griffen dijo que incluso los periodistas que no sufren abusos en línea deberían unirse a esas redes para brindar apoyo a sus colegas que sí los sufren.

Incorporar la perspectiva de género

La investigación del IPI sobre los protocolos de seguridad de las redacciones reveló un común denominador universal: no solo que las mujeres periodistas son atacadas online con mayor frecuencia que los hombres, sino también que esos ataques son especialmente sádicos y a menudo altamente sexualizados. En el caso de Rappler, Gloria explicó que la redacción está conformada por un 60% de mujeres y dirigida por una mujer, Maria Ressa. No es coincidencia, pues, la cantidad de acoso que ha recibido la publicación.

Hannah Storm, directora de la Red de Periodismo Ético con sede en el Reino Unido, dijo desde el público que los medios necesitan incorporar una comprensión de las amenazas particulares que enfrentan las mujeres. Eso incluye nombrar mujeres a cargo de la seguridad digital de las redacciones, lo que todavía es inusual en la industria.


Megan Clement es periodista y editora especializada en género, derechos humanos, desarrollo internacional y política social. También escribe acerca de París, donde vive desde 2015.

Este artículo apareció originalmente en el sitio de la Red Global de Periodistas de Investigación (GIJN), y se publica en IJNet con permiso.

Imagen con licencia Creative Commons en Unsplash vía Matthew Brodeur.