En mayo de 2011 Microsoft pagó US$8.500 millones de dólares por el servicio de Skype, con el objetivo de reforzar su negocio de los smartphones.
Ahora, en momentos en que Facebook lanza su servicio de videollamadas, las que pueden ser grabadas, Microsoft aparece con una nueva carta: Legal Intercept, una tecnología patentada que permite interceptar y monitorear las llamadas de voz o de video legalmente, como su nombre lo dice.
La tecnología se implementará con el fin de hacer seguimientos y poder grabar conversaciones potencialmente delictivas. Para Microsoft, es una herramienta similar a las que poseen las empresas de telecomunicaciones para cumplir con los estándares requeridos en materia de seguridad.
La noticia hizo que Twitter se viera inundado de comentarios, algunos sólo informando los hechos mientras otros se mostraban más preocupados con el asunto. Como siempre, la privacidad sigue siendo un tema delicado en esta materia.
Skype es un software desarrollado en 2003, que permite comunicaciones de texto, voz y video a través de Internet. Tiene alrededor de 600 millones de usuarios registrados pero sin embargo sólo el 10% de ellos paga por el servicio. Hasta ahora ha sido una importante herramienta para facilitar la tarea de los periodistas en sus investigaciones.