Diversificar los ingresos, los ahorros y las inversiones son algunas de las claves para sostener financieramente un proyecto periodístico. “Nunca hay que gastar más de lo que se gana. No hay que endeudarse para gastos corrientes, ordinarios y fijos, como pagar salarios o alquiler. Solo se justifica contraer deudas para crecer, innovar y emprender nuevos desarrollos”, recomendó Marianela Palacios Ramsbott, periodista venezolana especializada en economía y finanzas, durante el seminario web "Educación financiera para proyectos periodísticos, "organizado por el Foro Pamela Howard sobre cobertura de crisis mundiales, de ICFJ e IJNet.
Palacios destacó que en los últimos 23 años se ha dado una revolución tecnológica mucho más avasallante que todo lo ocurrido anteriormente en el campo de la comunicación, desde el inicio de la escritura manuscrita, hace más de veinte siglos.
“Estos cambios tecnológicos revolucionarios hicieron tambalear a los medios tradicionales de comunicación que no se adaptaron con suficiente rapidez. El modelo de negocios que los sostuvo en el siglo XX, que se basaba en la venta de contenidos, en los ingresos de publicidad y en la reinvención de las utilidades para crecer, ya no funciona con la misma eficiencia en el siglo XXI. Ya casi nadie compra diarios impresos, porque podemos leer gratis las noticias en internet”, agregó.
Para la experta, la revolución tecnológica, que buscaba democratizar el conocimiento y disminuir desigualdades, terminó convirtiéndose en algo muy distinto, llevando a una gran fragmentación de los medios de información y comunicación. El periodismo multimedia aumentó los costos de producción. El modelo de negocios de las empresas periodísticas tuvo que modificarse y las que no alcanzaron a adaptarse, se quedaron afuera.
“El modelo de negocios se fracturó. La publicidad se concentra hoy más que nunca en gigantes tecnológicos, no en empresas de comunicación social e información. Para encontrar sostenimiento es clave diferenciarse, apostar por el periodismo de calidad y diversificar los ingresos. Si antes la preocupación era vender contenidos y conseguir publicidad, ahora tenemos por lo menos quince alternativas adicionales para aumentar esa capacidad de ingresos y equilibrar los balances”, explicó.
Qué proponerle a Bill Gates
Citando a María Cristina Colmenares, directiva de Media Development Investment Fund (MDIF), Palacios puso como ejemplo: “Si te topas con Bill Gates en un ascensor tienes solo minutos para exponer cuál es tu proyecto y cómo puede contribuir al mundo”.
Ante este hipotético encuentro con el fundador de Microsoft, recomendó:
- Tener objetivos claros
- Definir mensajes clave paras mercadear el producto
- Aprovechar oportunidades
- Garantizar rentabilidad
El financiamiento de un proyecto periodístico es una tarea compleja que antes no formaba parte del día a día de los periodistas en los medios tradicionales, que solo se preocupaban de redactar o producir sus contenidos y esperaban el cheque de la quincena. “Hoy la historia de nuestras redacciones es muy distinta. Los periodistas deben involucrarse en el sostenimiento financiero de los proyectos”, enfatizó.
La experta en economía y finanzas señaló que el presupuesto promedio de las nuevas organizaciones de medios y prensa libre es de entre US$70.000 y US$100.000 por año.
Opciones de financiamientos
Entre las opciones de financiamientos tradicionales, enumeró:
- Capital semilla.
- Ahorros propios o inversiones del círculo familiar y/o social que cree en el proyecto.
- Ahorros de terceros a un costo mayor, como la banca, que tiene tasas al alza en 2022.
- Publicidad.
- Pago de contenidos.
En cuanto al cobro por contenidos, entre las opciones tradicionales, compartió los siguientes ejemplos:
- La venta de información impresa, como lo sigue haciendo el diario Últimas Noticias en Venezuela, al igual que muchos otros periódicos que sobreviven de la época analógica.
- Las suscripciones digitales (que va en aumento, para muchos medios).
- Membresías. Puso el ejemplo del medio ElDiario.es, de España, que ha alcanzado cerca de 70.000 socios, que en promedio aportan EUR80 cada uno en forma anual. A cambio, los socios y socias de elDiario.es disfrutan de una serie de ventajas exclusivas
- Textos patrocinados o Branded content, tal como lo hacen medios como El Estímulo o el Hispano Post, en Venezuela.
- Micro mecenazgo o Crowdfunding. Para ello, recomendó la Guía de crowdfunding para periodistas del Global Investigative Journalism Network.
- Contenidos exclusivos (como lo hace la Unidad de Inteligencia de The Economist).
- Fórmulas mixtas.
Palacios también habló de opciones de financiamiento no tradicionales para los proyectos periodísticos. “Una opción es el mercado bursátil. En algunos países, como en España, hay varios medios que cotizan acciones en bolsa. Pasaron crisis importantes en años anteriores, y para salir optaron por vender acciones en bolsa y pagar las deudas. Han logrado equilibrar su balance financiero, pero tienen como socios capitalistas a banqueros o empresas de telecomunicaciones. Para los medios preocupados de su independencia editorial, esto puede ser un problema”, expresó.
El proceso implica la emisión de deuda, acciones y otros valores, con rentas fijas y variables, considerando riesgo versus rendimiento, costos de intermediación, con altos estándares exigidos a empresas: gobierno corporativo y otros.
A su vez, incluyó en la lista a incubadoras y aceleradoras:
- GNI Startups Lab Hispanoamérica
- Startup Chile
- ALTEC
- Acelerador Next Media
- Ciudad del Saber en Panamá
- Dubai Museum
- Aceleradoras de comunidad de Google
- Google News Initiative Challenge
Entre las opciones de financiamiento a proyectos de periodismo en América Latina, Palacios también mencionó: alianzas (como Fundación Gabo); otras fundaciones (como la ObamaFoundation, el Bezos Earth Fund o la Gates Foundation) y organizaciones filantrópicas (Open Society, SembraMedia, Media Development Investment Fund, Membership in News Fund, Luminate, North Base Media e Hispanic Business Initiative Fund).
Puede ver el seminario web completo aquí:
Imagen de micheile dot com.