Lanzar una publicación de noticias online es la parte fácil.
Pagar las cuentas y sobrevivir durante varios años es la parte difícil.
Tres de los medios que han evolucionado y sobrevivido en los últimos cinco años son La Silla Vacía, un sitio web colombiano sobre política, Homicide Watch, una plataforma de datos y noticias que funciona en tres ciudades de Estados Unidos, y Texas Tribune, un sitio de noticias centrado en la vida cívica de ese estado.
Frecuentemente lleva al menos cuatro intentos que una iniciativa digital consiga el impulso necesario para salir adelante, dijo Michael Maness, vicepresidente del Programa de Periodismo e Innovación de Medios de la Fundación Knight.
Maness moderó un panel en el que varios editores contaron sus experiencias durante el Simposio Internacional de Periodismo Online, realizado el 5 de abril en el Centro Knight para el Periodismo Digital en las Américas en Austin, Texas.
Poder en Colombia
Juanita León, fundadora y editora responsable de La Silla Vacía, dijo que su equipo de cuatro periodistas busca cubrir cómo la política y el poder económico se hacen sentir en Colombia.
Sería muy fácil declararse en quiebra haciendo periodismo de investigación en Colombia, dijo, porque esta práctica ofendería a muchas de las personas y organizaciones que cuentan con los recursos para ser patrocinadores o anunciantes. Así que considera un éxito que, tras los cinco años del sitio, pudo tener dos hijos y no ha tenido que vender su coche para continuar con el proyecto.
La Silla, como le apodan al sitio, tiene alrededor de 500.000 usuarios únicos al mes. El personal escribe cinco artículos originales al día, alberga una plataforma destinada al debate y publica 15 blogs. León ve a La Silla como un laboratorio para probar innovaciones en la producción y distribución de noticias.
El equipo ha experimentado con nuevos formatos de noticias y bases de datos, entre éstas, una que traza las conexiones entre familias poderosas y figuras políticas. Ya han obtenido muchas primicias, han ganado premios internacionales y han conseguido un impacto muy importante. Una encuesta nacional de líderes de opinión mostró que es el tercer sitio web más leído en el país.
Los ingresos y gastos mensuales del sitio suman un total de alrededor de US$40.000. La mayor parte de este dinero se destina en salarios. En 2013 los ingresos provinieron de:
- 23% de anuncios
- 52% de subvenciones, principalmente de la Open Society Foundation
- 12% de talleres y consultas a medios independientes
- 7% de contribuciones de lectores, llamados “súper amigos”
- 6% de eventos universitarios tales como la organización de debates de alto nivel
Entre sus recomendaciones a los aspirantes a ser emprendedores digitales, León consideró:
- Contrata a artistas y a ingenieros tanto como a periodistas para promover la creatividad
- La forma en que te ves importa mucho: ¿Eres un servicio comunitario o un negocio?
- Ten una personalidad única
- Construye sobre las redes ya existentes
- Sé transparente; dale a conocer a las personas cómo y por qué has cometido un error
- Cada usuario es importante
Colombia ha vivido décadas en medio de un conflicto armado entre grupos de derecha y de izquierda, por lo que gestionar la sección de comentarios de La Silla ha sido difícil. Los usuarios tienen que registrarse con sus nombres reales y aceptar reglas cívicas para poder participar.
“Respondemos a cada comentario”, dijo León. “Eso te da una relación diferente con tu audiencia”.
Una nueva forma de hacer reportajes sobre el crimen
Laura Amico, CEO y fundadora de Homicide Watch D.C., también ha pasado por la historia de vivir cerca del límite financieramente para mantener a su proyecto empresarial en marcha. "Comenzamos con nuestros propios recursos desde el primer día. Nunca tuvimos inversionistas. Estamos pagando nuestras cuentas", me dijo en una entrevista.
“Tras cinco años, cada día me hago la pregunta de si esto es viable. Siempre estamos buscando socios”.
Su idea original consistía en conocer mejor su barrio investigando cómo la violencia lo afectaba y de qué forma funcionaba el sistema de justicia criminal. Decidió seguir cada caso de homicidio a través del sistema judicial de D.C. desde varias perspectivas: la de las víctimas, los sospechosos, los investigadores, los fiscales y los condenados.
El lema del sitio describe bien este punto de vista: "Marca cada muerte. Recuerda a cada víctima. Sigue todos los casos".
Amico contó cómo ella y su esposo Chris, un periodista de datos y programador de computadoras, recortaron drásticamente sus salidas a cenar y otras actividades sociales para poder financiar el proyecto.
Hace un año ambos se mudaron a Boston para que Laura pudiera estudiar en Harvard con la beca Nieman-Berkman. Cuando se fueron, el problema era que no sabían quién se quedaría cargo de Homicide Watch. Entonces, lanzaron una campaña en Kickstarter que recolectó US$47.000 para poder pagar un personal de estudiantes que pudiera mantener el sitio. Ahora ella lo utiliza como plataforma para capacitar a jóvenes periodistas en la cobertura del sistema de justicia criminal.
Casi todos los ingresos del sitio provienen de licencias por la concesión de un software de seguimiento de datos para The Chicago Sun-Times y The Trentonian, que también trabajan con servicios del Homicide Watch.
Del crimen a la educación
Laura y su esposo están ampliando su concepto de una cobertura periodística estructurada hacia la educación, con la ayuda de WBUR en Boston, la Fundación Knight y la Fundación Boston, tal como se describe en este artículo de NiemanLab.
"Trabajar con Homicide Watch es lo que me da más orgullo de mi carrera", me dijo Amico. "Los retos a los que nos enfrentamos cada día son extremadamente difíciles. Hace cinco años no imaginaba que tendría que tener las conversaciones que tengo hoy en día sobre socios y publicidad, ni tampoco las obligaciones legales que debo afrontar pagando impuestos. Son cosas realmente difíciles de aprender".
Lo que la hace seguir adelante, dijo, son los comentarios del sitio web, como cuando un familiar de una víctima de un homicidio que le dio las gracias por mostrar a su ser querido como una persona y no sólo como una estadística del crimen.
En Texas, cuatro millones de dólares en capital semilla
En cambio, la historia detrás del Texas Tribune (conocido también como The Trib) no implicó un inicio sin capital, sino el desarrollo de un modelo de negocios para el periodismo de investigación.
La editora, Emily Tamshaw, le dijo a los asistentes del Simposio Internacional de Periodismo Online que el modelo periodístico y de negocios ha evolucionado desde que The Trib fue lanzado en 2009, con un capital semilla de cuatro millones de dólares. En aquel tiempo tenía un personal de 29 trabajadores. Hoy tiene 40.
“Desde el principio nos enfocamos en producir bases de datos en los que se pudiera realizar búsquedas”, dijo. Comenzaron dando a conocer una base de datos sobre los salarios de los empleados públicos, que fue muy popular. Luego expandieron la oferta de datos e incluyeron información de escuelas públicas, del uso del agua, de grupos de presión y del financiamiento de campañas. Estos datos permiten atraer mucho tráfico al sitio web.
The Texas Tribune tuvo a 570.000 visitantes únicos y 3,1 millones de vistas en su página en febrero. Su audiencia se conforma de un 91% de graduados universitarios. A su vez, el 51% de sus usuarios tiene otro título más avanzado y el 52% gana US$100.000 o más.
The Trib es una organización sin fines de lucro y le proporciona su contenido gratuitamente a otros medios, incluyendo paquetes televisivos para estaciones locales. Incluso han creado pequeñas aplicaciones que otros medios pueden usar en sus sitios web para seguir, por ejemplo, los resultados de las elecciones en áreas de cobertura local.
The Trib trata de generar alrededor de un 20% de sus ingresos de cada uno de sus cinco tipos de fuentes. El año pasado obtuvo 5,4 millones de dólares en ingresos, desglosados de la siguiente forma:
- 23% de patrocinadores corporativos
- 16% de donantes individuales
- 22% de eventos
- 18% de fundaciones
- 13% de membresías
El año pasado los gastos fueron de 4,7 millones de dólares, por lo que la operación generó un superávit sustancial.
Los eventos se han convertido en una parte fundamental de su presupuesto, generando cerca de un millón de dólares en 2013. El festival anual del Texas Tribune dura varios días y vende unas 2.500 entradas.
La publicación también realiza desayunos gratis a lo largo del estado, en donde jerarcas públicos son entrevistados por los reporteros y editores del Trib. "Creemos que los acontecimientos son noticias y son periodismo", dijo Ramshaw. "Pensamos que nuestros lectores y usuarios deben estar en la misma habitación con las personas que las representan".
Las próximas innovaciones incluirán boletines informativos enfocados en temas concretos como el uso del agua, la educación pública y el transporte. La clave está en seguir evolucionando.
Este post fue publicado originalmente en News Entrepreneurs y es reproducido en IJNet con permiso del autor.
James Breiner es consultor de periodismo online y liderazgo. Es exdirector del programa de Global Business Journalism en la Universidad de Tsinghua y becario de la Knight International Journalism Fellowship. También lanzó y dirigió el Centro de Periodismo Digital de la Universidad de Guadalajara. Bilingüe en español e inglés, puedes seguirlo en Twitter aquí.
Texto traducido den inglés al español por Andrea Arzaba.
Imagen de Emily Ramshaw, editora del Texas Tribune, cortesía de James Breiner.