Los medios de comunicación no tienen claro cómo evaluar el aporte de su trabajo a la sociedad. Para entender mejor y comunicar este valor, tenemos que mejorar la manera de medir el verdadero impacto del periodismo. Las tecnologías de análisis nunca han sido más abundantes y accesibles al punto de casi lograr hacer lo que necesitamos, pero todavía necesitamos mejores herramientas.
Estos problemas me llevaron al evento "Research, Three Ways" del Brown Institute for Media Innovation y el Tow Center for Digital Journalism. El evento reunió a periodistas, tecnólogos y expertos en medios de comunicación para estimular la investigación sobre el aumento de la transparencia, los usos innovadores de los datos en el periodismo y cómo medir su impacto.
Medir el impacto ocupa una gran parte de mi atención en las Knight International Journalism Fellowships. Nuestros becarios ejecutan proyectos en todo el mundo para mejorar la vida de las personas a través del periodismo. Seguimos y comunicamos el impacto de nuestro programa para entender lo que funciona y lo que podemos mejorar. Nuestros seguidores saben el valor de este trabajo y la comunidad periodística puede beneficiarse de las lecciones aprendidas. Estamos lanzando nuestro nuevo programa que se enfoca en crear culturas de innovación en los medios para mejorar el flujo de información de calidad. Esto significa que estoy inmerso en la pregunta: "¿Cómo podemos medir y comunicar el impacto de la innovación periodística en un ambiente de rápidos cambios tecnológicos?"
Gracias al formato del evento, en el que las personas crearon grupos de discusión por temas de interés, interactué con mentes brillantes, como Brian Abelson, el Open News Fellow y experto en medir el impacto de medios que acaba de incorporarse al The New York Times para enfrentar el reto de la medición del impacto. Nuestra tarea: identificar las preguntas clave que a menudo quedan sin respuesta y desenterrar nuevas ideas para hacerles frente.
Estuvimos de acuerdo en que todavía es muy difícil evaluar el impacto de un artículo determinado. ¿Qué tipo de cobertura impulsó a otros periodistas y medios de comunicación? ¿Cambió el tipo de cobertura? ¿Cambió el comportamiento humano o la política? ¿Cómo podemos automatizar este tipo de seguimiento? ¿Puede hacerlo la tecnología de hoy en día? ¿Hay alguien que ya esté automatizando este proceso?
Ciertamente, ya existen medidas de impacto basadas en la tecnología como la analítica web, las menciones en redes sociales y las métricas relacionadas. Existen paneles de control para que podamos verlo todo en un sólo lugar. Pero estos miden impacto en la atención. El modelo y la tecnología son todavía muy nacientes para medir el impacto en el comportamiento y la política más allá de la página web, el programa de televisión, la aplicación móvil.
Google Alerts puede rastrear palabras clave en la web. La herramienta If This Then That puede hacer que las alertas creadas por el usuario y otras formas de menciones, como Twitter, sean publicadas automáticamente en hojas de cálculo de Google. Fusion Tables puede convertir estos datos en visualizaciones para crear paneles de integración. Sabiendo un poco de programación se puede establecer un lugar único para el seguimiento y monitoreo. Desafortunadamente, son relativamente pocos los periodistas que saben programar y pocos medios de comunicación pueden permitirse el contratar desarrolladores. Y se necesita saber bastante para crear las sofisticadas herramientas de código abierto que necesitamos específicamente para medir el impacto del periodismo.
La medición se puede hacer manualmente. Por ejemplo, a través de entrevistas y encuestas con personas interesadas o búsquedas web para ver qué historias surgen y conectarlas visualmente a mano (piensa: publicar enlaces en orden en una página Web o en Storify). Pero estos son caros, lentos y difíciles de escalar.
Automatizar la medición de impacto, por lo tanto, sería un gran alcance.
Imagínalo. Los periodistas y los medios mostrando su impacto, ganando la confianza del público, para que éste vea con claridad quién tiene la mejor información disponible y quien hace una diferencia, en lugar de tener que confiar únicamente en la fe o la reputación del medio. A su vez, esto podría impulsar a los periodistas y los medios a medir más exhaustivamente, respaldados por datos, sobre su valor en el mundo.
Por supuesto, argumentos contrarios fueron mencionados. ¿Perdemos algo importante si los reportajes se escogen únicamente cuando se enfocan en tener impacto? ¿No corremos el riesgo de tener una falacia lógica y de tergiversar la historia completa si asumimos que el periodismo es el único catalizador de un impacto dado, cuando normalmente hay grandes fuerzas gubernamentales y sociales que considerar? ¿Realmente es el papel de un periodista siempre tener un impacto? Si no lo hace, ¿eso plantea preguntas sobre el apoyo de fundaciones, que cada vez más pagan por tener un impacto a través del periodismo?
Al final, nos pusimos de acuerdo en que los periodistas y los medios de comunicación necesitan hacer más para destacar claramente su valor y que mejores herramientas automatizadas simplificarían la medición de impacto más allá de los productos noticiosos. Al hacerlo, podríamos construir confianza, lo que volvería a los medios de comunicación más competitivos en la lucha por una audiencia e ingresos. Incluso puede ser la diferencia entre la viabilidad y la extinción.
Ben Colmery es el director ejecutivo de las Knight International Journalism Fellowships para el Centro Internacional para Periodistas.
Imagen cortesía Michael Gallagher en Flickr. Licencia Creative Commons.
Este artículo fue traducido del inglés al español por Nathalie Cornet.