Pros y contras de seis tipos de periodismo colaborativo

por Laura Hazard Owen
Oct 30, 2018 en Periodismo colaborativo

Algunos de los mejores proyectos de periodismo colaborativo de los últimos años han sido los Panama Papers y Electionland. El Center for Cooperative Media de la Escuela de Comunicación y Medios de la Universidad Estatal de Montclair ha estudiado el aumento de la cooperación entre organizaciones de noticias y acaba de publicar un informe en el que se describe de qué manera el periodismo colaborativo ha “evolucionado de un experimento a una práctica habitual”.

El estudio, escrito por la directora de investigación Sarah Stonbely, identifica seis modelos de periodismo colaborativo y cataloga 44 colaboraciones en curso de más de 500 salas de redacción, la mayoría de los Estados Unidos, pero también de Europa. Una definición de la práctica colaborativa es que "siempre busca producir contenido que sea mayor que lo que cualquier periodista, redacción u organización individual podría producir por sí mismo".

1. Temporal y por separado: “Proyectos únicos/finitos, en los que los socios crean contenido por separado y lo comparten”. Un beneficio de este tipo de colaboración es que, al asociarse con medios más grandes, “los medios o colaboradores más pequeños obtienen una visibilidad mucho mayor de la que tendrían de otra manera”. Es importante centrarse en el control de calidad, y los proyectos en los que las decisiones no se toman con anticipación –por ejemplo, quién producirá qué contenido– tienden a tener problemas. Ejemplo: El proyecto de personas sin hogar en San Francisco, dirigido por el San Francisco Chronicle, que mi colega Shan Wang cubrió el año pasado.

Puede ser difícil saber cómo le va realmente a estos proyectos. Se supone que el Reentry Project, que reúne a medios de Filadelfia para cubrir asuntos relacionados con la reincorporación de presos a la sociedad, genera tráfico en todos los medios asociados, ya que su trabajo aparece en el sitio web del Reentry Project. “Necesitamos tener métricas que demuestren que esta vinculación entre medios está generando más tráfico; no estoy seguro de que alguien lo haya comprobado”, dijo el editor del proyecto, Jean Friedman-Rudovsky. "Pero hay quienes han mencionado de manera anecdótica que han revisado la información y efectivamente están recibiendo parte de su tráfico desde la página del proyecto”.

2. Temporal y co-creativa: “Proyectos únicos/finitos en los que los medios asociados trabajan juntos para crear contenido”. Un ejemplo es Electionland, una colaboración entre siete organizaciones emblemáticas, 250 redacciones y 600 colaboradores voluntarios durante las elecciones presidenciales de 2016 en los Estados Unidos. Este tipo de colaboración es particularmente bueno para las historias de investigación y transparencia, pero “las diferentes prioridades de los distintos medios pueden entrar en conflicto y afectar la colaboración”.

3. Temporal e integrada: “Proyectos únicos/finitos en los que los medios asociados comparten contenido/datos/recursos a nivel organizativo”. Como ejemplo podemos citar a los Panama Papers, una de las mayores colaboraciones periodísticas hasta la fecha. También el Magnetar Trade project, acerca de la crisis financiera de 2008, y que involucró a ProPublica, This American Life y Planet Money. Otro ejemplo es CrossCheck de First Draft News.

4. Continua y por separado: “Colaboraciones continuas y abiertas en las que los socios crean contenido por separado y lo comparten”. Este modelo incluye "algunas de las colaboraciones periodísticas conocidas más antiguas", como la de USA Today Network y CNN, así como asociaciones entre medios locales, y es también el modelo de periodismo colaborativo más común.

5. Continua y co-creativa: “Colaboraciones continuas y abiertas en las que los socios trabajan juntos para crear contenido. Un ejemplo es el "proyecto de cobertura colaborativa" entre NPR y sus estaciones afiliadas.

La Cooperativa de Periodismo de Detroit fue concebida como un proyecto temporal cuando se lanzó en 2014, involucrando a cinco medios de la ciudad para reportear sobre el Detroit post-quiebra. Recibió fondos de las fundaciones Knight y Ford, pero cada medio recibió una cantidad diferente de dinero, “lo que creó tensión y diferencias en la manera en que cada uno priorizaba a la Cooperativa”. El proyecto pasó al siguiente nivel cuando los medios se unieron para el 50 aniversario del informe de la Comisión Kerner.

Durante ese tiempo también contrataron a un nuevo editor de colaboración: Scott McCartney. Una de las novedades que introdujo McCartney al flujo de trabajo fue escalonar la publicación de contenido (hasta ese momento habían estado publicando historias a granel). Él notó que la mayoría de los visitantes no pasaban suficiente tiempo en el sitio como para terminar siquiera una historia, y mucho menos 10. La liberación escalonada del contenido también significó que las personas que entraban al sitio desde de las redes sociales siempre encontraran algo nuevo.

6. Continua e integrada: “Colaboraciones continuas/abiertas, en las que los socios comparten contenido/datos/ recursos a nivel organizativo". El modelo no es común todavía, pero “lo vemos como una forma innovadora de abordar los desafíos de los medios locales”. CoastAlaska es una asociación de siete estaciones de radios públicas de Alaska: “cada estación local funciona independientemente en la parte editorial, pero están completamente integradas en el lado del negocio”, compartiendo servicios de back-office. Otra de estas asociaciones es la red de noticias locales de Nueva Jersey y TAPinto.

Ohio Valley ReSource es una colaboración entre siete estaciones de radio de Kentucky, Virginia Occidental y Ohio, iniciada con una subvención de la Corporación para la Radiodifusión Pública en 2015. “Es útil mirar las tendencias regionales; la crisis de los opioides es un ejemplo clásico de esto. Así verás qué tendencias se mueven como una ola en toda la región”, dijo Jeff Young, editor jefe de Ohio Valley ReSource (y becario Nieman en 2012). “Las historias locales suelen ser parte de historias regionales más grandes, y trabajar entre varios medios nos permite conectar los puntos para ver lo que está sucediendo”.

Puedes ver el informe completo de Stonbely aquí.

Este post fue publicado originalmente en Nieman Lab y es reproducido en IJNet con permiso.

Imagen con licencia Creative Commons en Flickr, vía Ville Säävuori.